Vitoria. Desde hace ya muchas legislaturas, la presencia del Gobierno Vasco en Álava, por lo menos en lo que respecta a la materia cultural, es exigua. No encabeza ni lidera ningún proyecto o infraestructura y se limita a realizar inversiones económicas, dinero que, sobre todo en los dos últimos años y bajo la tiranía de la situación económica actual, ha ido decreciendo de manera paulatina, sin olvidar que algunas iniciativas con recursos monetarios importantes como el programa Fábricas de Creación se han caído en este 2011 por las decisiones de otras instituciones y entidades (como ha pasado con el Proyecto Amarika y los talleres de Zaramaga). De cara a 2012, el área que dirige Blanca Urgell tiene previsto recortar un 8,2% sus cuentas para todo Euskadi, un porcentaje que puede resultar engañoso de cara a su provincia natal ya que las partidas específicas previstas por Lakua para el territorio bajan una media del 20%, es decir, un tijeretazo de proporciones bastante mayores.
Es más, del proyecto presupuestario para el próximo año ha desaparecido la partida de 270.000 euros que este ejercicio ha destinado el Gobierno de Patxi López al desarrollo del Plan Director de Iruña Veleia. Pero en este caso, la crisis no es la excusa. Ayer, durante la presentación de las cuentas autonómicas ante el Parlamento Vasco, el equipo de Urgell dejó bien claro que no piensa poner ni un euro más ni en 2012 ni a futuro incluso desatendiendo el mandato de la Cámara aduciendo que el yacimiento no es de su competencia y que de su financiación se tiene que encargar en exclusiva la Diputación alavesa.
Confirmado este extremo (que supone un recorte del 100%), otras rebajas de gran calado decididas por Urgell y el viceconsejero de Cultura, el también alavés Antonio Rivera, sí que tienen nombres y apellidos. El peor parado de los recortes de las partidas que de manera específica se destinan a Álava es la asociación que organiza el Festival de Jazz de Vitoria, que pierde 23.000 euros o lo que es lo mismo, un 30% con respecto al año pasado.
A partir de ahí viene el grupo de propuestas que se quedarán sin el 20% de los recursos procedentes del Gobierno Vasco. Le pasará a la Fundación Catedral Santa María, que dejará de recibir 60.000 euros; el Centro Zain para el estudio y la conservación del patrimonio, que perderá 76.500 euros; al Valle Salado de Añana, al que se le quitarán 50.000 euros; y al propio Ayuntamiento de Gasteiz, cuyas actividades culturales tendrán que organizarse con 10.000 euros menos.
De todas formas, el que más dinero pierde es Artium, aunque en porcentaje esa reducción no parezca tan llamativa como en otros casos. De hecho, Lakua reducirá un 12% su aportación (a través de una partida referida al programa Eremuak y otra sobre la explotación del museo) que se traduce en un tijeretazo de 97.590 euros.
Es decir, en lo que respecta a aquellas partidas de exclusiva aplicación en Álava, la bajada para 2012 es de 318.090 euros, pero confirmado el abandono de Iruña Veleia, el territorio perdería 588.090 euros. La única excepción la marca el dinero dirigido al mantenimiento de los servicios comarcales de archivo, que crecerá en 25.000 euros.
Más allá de las cuestiones referidas de manera nominal a Álava, las cuentas desgranadas ayer ante la Cámara autonómica por el área dirigida por Urgell dejó claro que Lakua tiene dos apuestas claras para 2012: la realización del Año de las Culturas por la Paz y la Libertad (seis millones de euros); y Kultur Klub (un proyecto de impulso al consumo dotado con 400.000 euros). En el resto de campos se mantendrá lo hecho hasta ahora, eso sí, asumiendo fuertes rebajas.