SIDNEY. El "planking", que consiste en tumbarse boca abajo en lugares públicos inusuales y muchas veces peligrosos, ya se ha cobrado la vida de al menos una persona en Australia.
La prensa local señaló que uno de los despedidos trabajaba para la gigante minera BHP Billiton y el resto eran empleados de la empresa constrctora Conneq, subcontratista de la gigante minera en diversos yacimientos de Australia Occidental.
Una portavoz de BHP Billiton dijo a la agencia local AAP que los trabajadores participaron en tres incidentes separados durante el fin de semana pasado, sin dar mayores detalles sobre los hechos.
Se cree que de dos los seis trabajadores dados de baja por Conneq fueron despedidos por practicar "planking"; otros tres, entre ellos el supervisor, por mirar; y el último, por tomar fotografías, según la emisora local ABC.
El director general de Conneq, David Marchant, se limitó a explicar que la medida responde a la violación de las normas de seguridad laboral y a una conducta que potencialmente puso en peligro la seguridad de las personas, indicó la AAP.
El mes pasado un joven fue detenido por intentar tumbarse sobre un vehículo policial y días después otro joven murió al intentar hacer "planking" en el balcón de un edificio de siete pisos en el noreste de Australia.
Max Key, hijo del primer ministro de Nueva Zelanda, John Key, fue nombrado esta semana el "planker" número uno de ese país, después de colgar una foto en internet donde él aparecía tumbado boca abajo mientras su padre miraba en un segundo plano.
Unas 12.500 personas se han unido a la página de Facebook de "Planking New Zealand", mientras que la página de "Planking Australia" cuenta ya con 100.000 aficionados.