Barcelona. El hermano del conocido diseñador Custo Dalmau y administrador de Blue Tower que gestiona Custo Barcelona, David Dalmau, reconoció el pasado jueves ante el juez el parecido entre el diseño de un pájaro estampado en una serie de camisetas y vestidos de la marca catalana y el dibujo animado Piolín, pero sostuvo que no se trata del mismo dibujo.

En el juicio celebrado el jueves en la Ciudad de la justicia, el hermano del modisto explicó que el parecido entre su dibujo y el personaje de Warner Bros es "obvio", pero aseguró que no había ninguna intención de plagio, ya que la idiosincrasia de la marca es "tener un estilo propio" y no les interesaría nada copiar patrones ya creados.

El acusado explicó que el diseño fue encargado a una freelance, la también acusada Carmen G.H., en una serie de dibujos en las que aparecían chicas Pin-up en sus casas con sus mascotas, y que una de ellas era de un pájaro, aunque no había intención de plagiar al popular personaje.

"Ya hemos hecho otras series de estas chicas en ciudades u otros ámbitos, lo importante del diseño es la chica no el muñeco", expuso Dalmau, matizando que cuando lo recibieron no cayeron en la cuenta del parecido, ya que, en caso contrario, habrían escogido otro.

La diseñadora gráfica acusada declaró que el dibujo tiene su estilo y que cogió la inspiración de unos peluches, de los que ninguno de ellos era Piolín asegurando que el suyo es "un estilo concreto y muy identificable", que se observa tanto en el dibujo de la chica con el cisne, con el elefante, con el conejo y con el pollo de la discordia. Según el representante de Warner Bross, la compañía envió desde Londres un burofax el 8 de junio de 2005, pidiendo la retirada de las prendas de ropa y Custo respondió dos días después que, pese a que no creían que se tratase del mismo dibujo, lo retirarían para no tener problemas, cosa que también ha explicado el propio Dalmau.

Un mes mas tarde, la multinacional estadounidense vio en una tienda del Aeropuerto de El Prat que vendía diversas marcas, que la prenda se seguía comercializando, por lo que pusieron una denuncia que llevó a que Agentes de la Guardia Civil registraran tiendas de Custo Barcelona interviniendo en una de ellas 16 prendas con la referencia "Maxi Pio", 16 más con la referencia "Basket Pio" y dos prendas referenciadas como "Fit Pio", todas ellas con el famoso dibujo.

intención de retirarlas El acusado explicó que tenia previsto retirar las camisetas del mercado, pero puntualizó que no es una tarea fácil.

Además, en respuesta a preguntas de la fiscal, los agentes explicaron que ninguna de ellas estaba expuesta en la tienda ni tenía el precio.

Según Dalmau, las camisetas tienen un valor de coste de entre 12 y 15 euros, y se venden a 59 euros y que los vestidos cuestan poco más de 100 euros, aunque dependía de si se vendían en las tiendas propias de la marca o en otros establecimiento el que recaudaran el beneficio neto.

La fiscal explicó que no se puede establecer cuál ha sido el prejuicio causado a la Warner, que ha retirado su acusación, pero que, en todo caso, no supera los 400 euros. Por ese motivo, modificó su escrito y en lugar de pedir un año y medio de cárcel y 18.000 euros de multa por un delito contra la propiedad industrial en concurso con un delito contra la propiedad intelectual, pide una multa de 480 euros por una falta contra el patrimonio, habida cuenta de la modificación de diciembre del código penal que expone que si el daño n-o supera la cantidad de 400 euros no es delito, sino falta.