madrid. El escritor Lorenzo Silva asegura que el planteamiento de la conocida como Ley Sinde no le gusta ni convence, y "deja mucho que desear como mecanismo de la regulación de propiedad intelectual en el entorno digital".
"La ley está a muchas galaxias de dejarme satisfecho", dice Silva preguntado sobre la recién aprobada normativa antidescargas, cuya percepción en la sociedad "es muy represiva". En su opinión, que presentó ayer en Madrid el lanzamiento de prácticamente toda su obra en formato digital a precios asequibles, lo aconsejable hubiera sido una reforma en profundidad de la ley de propiedad intelectual. Con todo, entiende que la ley ha salido adelante en un contexto político "muy difícil" y que la aprobación de una normativa que regule las páginas de descargas ilegales de contenidos "es mejor que nada, siempre que no pretendamos convertirla en la única solución". Silva cree que si la ley "puede ser positiva" si sirve para abrir el negocio legal de contenidos culturales.
asequibles Silva hizo estas declaraciones en el marco del anuncio del lanzamiento al formato digital de 31 de sus libros por un precio que va desde los 3,99 a los 5,99 euros y que incluyen, además de su serie protagonizada por Bevilacqua, títulos hasta ahora inéditos. El catálogo, editado por Destino, y que puede comprarse en cualquier librería digital, no tiene DRM, el sistema anticopia que impide colgar el archivo en Internet para su descarga ilegal o que un lector pueda prestar ese libro electrónico a otra persona o leerlo en otro dispositivo diferente. "Creo que la descarga de contenidos de forma ilegal es una cuestión de ética individual", asegura el escritor.
