BRUSELAS. El texto legal, cuyo borrador fue propuesto por la Comisión Europea (CE) en octubre de 2008, también busca reducir los costes a los comerciantes, así como facilitar la venta transfronteriza y garantizar la igualdad de condiciones, según informó hoy la Comisión Europea.
El acuerdo aún debe ser refrendado por el Parlamento Europeo (PE), lo que previsiblemente ocurrirá en el pleno del mes de marzo, después de que la comisión parlamentaria de Justicia emita su voto pertinente en febrero.
Según lo adoptado hoy, tras una discusión en el Consejo de Competitividad del 10 de diciembre pasado, los comerciantes estarán obligados a proporcionar información sobre las características del producto, el coste del envío o los impuestos aplicables, de manera que el consumidor pueda hacer una elección informada.
Asimismo, si el producto llega tarde o dañado, el comprador podrá devolverlo y exigir el retorno del dinero abonado, derecho que también podrá ejercer durante los 14 días siguientes a la compra, en caso de que cambie de opinión sobre la misma, abonando sólo los gastos de envío.
Este derecho también se aplicará para los servicios, incluso aunque la provisión de ese servicio ya haya comenzado. En ese caso, se restará del dinero devuelto la parte proporcional al servicio disfrutado.
Por otro lado, la legislación prohíbe que existan casillas marcadas automáticamente, como por ejemplo las que suelen incluir los portales de viajes, relativas a la contratación de seguros de viaje o a la prioridad de embarque.
Como norma general, el cliente no estará obligado a abonar los costes adicionales de los que no haya sido informado debidamente.
Sin embargo, durante la negociación los estados miembros han introducido un umbral de 60 euros, por debajo del cual no afectan las provisiones de esta directiva, que aún tiene que ser refrendada por la Eurocámara.