vitoria. Aunque la Children´s Library puso algunos precedentes en los años 20 (L"Heure Joyeuse), todo comenzó allá por 1965 en Francia, con Geneviève Patte como promotora. Impulsar la afición por la lectura entre los jóvenes no es un trabajo precisamente infalible. "Pero toda vez que se trabaje el tema tampoco va a perjudicar", apunta el escritor Rubén Ruiz.

Junto a la dibujante Eider Rodriguez, el autor alavés firmó Anekdotak, que le acarreó el Premio Euskadi de Literatura Infantil y Juvenil, y a ella la condición de finalista del mismo en el apartado de ilustración. Ahora -hoy mismo- este trabajo editado por Pamiela sirve como perfecta excusa para formar parte del programa de actos que anticipa el Día del Libro en Vitoria. Será en Villa Suso, con una velada (20.00 horas, en euskera y con entrada libre hasta completar aforo) que estará dividida en tres partes.

Rubén Ruiz tomará primero la palabra. En su intervención, tratará de contextualizar el marco teórico de la animación a la lectura, esa construcción que comenzó a cimentar Geneviève Patte y que cuenta hoy en día con almenas que recorren todo el mundo. Pero, esto de los Días del Libro, ¿es una apuesta ganadora a nivel práctico? "Las actuaciones puntuales tienen fuerza momentánea, hace falta un trabajo metódico y continuo, de mucho amor", asegura Rubén. "Y una vez realizado, el que lo ha recibido tiene que tener alguna motivación propia, si no se quedará en algo estéril", certifica. El peligro es que, vestidas de fiesta y celebración, en las jornadas dedicadas al libro finalmente "el acto de lectura se quede disipado, en la sombra".

La cita con Eider y Rubén promete atacar todos los flancos, desde el reflexivo hasta el lúdico. Primero Rubén buceará en la contextualización histórica del fenómeno de la animación lectora, reflexionando sobre la posibilidad de obtención de placer del lector, diseccionando la labor de los mediadores -familia, escuela, editores, profesores...- y finalmente paseando por los diversos programas específicos, desde Liburuen altxorra hasta algunos modelos de tertulia literaria.

A continuación será el turno de Eider, que mostrará al público que se acerque hasta Villa Suso una colección de ilustraciones y explicará como éstas pueden fomentar también el hábito de la lectura.

El final se entonará a cuatro manos. Y con sabor exclusivo. Rubén leerá "dos anécdotas nuevas, inéditas" a las que Eider pondrá paisaje en directo. Ella ya las ha leído, según confiesa Rubén, pero la improvisación y el poder del recitado, del momento, serán los que guíen esta noche el trazo de la artista zorrotzarra. Una oportunidad, por tanto, para añadir dos nuevas páginas a la lectura de Anekdotak.

El fomento de la lectura llegó al Estado español, como casi todo, un poco más tarde. "Es en los años 80 cuando se empieza a hablar de ello", explica Rubén, que hace poco dejó de formar parte del núcleo organizativo de Galtzagorri, una de las asociaciones que más trabajan por este compromiso de la lectura.

Sin embargo, no se separa nunca de esta faceta desde su labor docente. De hecho, en la ikastola ya están preparando los concursos con los que animan el Día del Libro Infantil y Juvenil, que han pospuesto un poco de su fecha original, el 2 de abril. Y desde el departamento de Cultura de Basaburua hacen lo propio con un liburu truke ya tradicional en estas fechas.

En todos los rincones, el Día del Libro pone sus marcadores para recordar que la lectura puede ser una de las mejores aficiones. Volvamos a leer la frase inicial. "Toda vez que se trabaje el tema, tampoco va a perjudicar". Pero, como con casi todos los "Días de...", no basta con el acto. Al acto debe seguirle, indefectiblemente, la acción. En este caso una acción solitaria, que exige un pequeño compromiso y aporta muchos placeres. Abrir un libro y disfrutar de la lectura.