LOS ANGELES. Las últimas informaciones que aparecen de la virulenta pelea que mantuvieron Charlie Sheen y Brooke Mueller el día de Navidad apuntan a que el actor de Dos hombres y medio habría amenazado a su esposa esgrimiendo un arma. Pese a todo, parece que ambos rechazan el divorcio.

Sheen salió de la cárcel donde permanecía ingresado desde el pasado viernes tras pagar una fianza de 8.500 dólares. El actor de Platoon deberá comparecer ante un juez en febrero acusado de los delitos de asalto en segundo grado, amenazas y conducta criminal, acompañados por un componente de violencia doméstica, según la Policía.

Según algunos medios estadounidenses, en medio de aquella discusión con su mujer, Sheen llegó incluso a esgrimir un arma y amenazarla de muerte delante de sus dos gemelos, que celebraban por primera vez la Navidad. La Policía no ha dado detalles sobre el tipo de arma, pero se cree que podría ser un cuchillo.

En un principio se informó que Mueller llamó a la policía tras ser agredida por Sheen. Los agentes se presentaron en su casa de Aspen, en Colorado, y detuvieron al actor de 44 años. Posteriormente, sin embargo, otra versión indica que Mueller estaba ebria y que atacó a su marido. Sheen aseguró que sólo se había defendido de ella.

Aunque la terrible disputa incluye la sospecha de que hubo violencia doméstica, ninguno de los dos actores tiene planes de divorciarse. Casados desde mayo de 2008, parece que ambos están "trabajando" para solucionar las cosas de forma "amigable", según ha informado el manager del actor, Mark Bug.

En esta misma línea, Bug ha negado que la pareja esté en crisis o que su matrimonio pase por malos momentos, lo que explicaría porqué Brooke se encontraba en Aspen sin Charlie Sheen antes de la pelea. Sin embargo, fuentes consultadas por Radaronline afirman que las cosas no son lo que parecen: Brooke y Sheen, que tiene una orden de alejamiento hacia su mujer, son "miserables" en su matrimonio y es sólo "cuestión de tiempo" que éste llegue a su final. Además, añaden que ha sido el actor el que ha conseguido que su mujer modificase su versión de los hechos para no acabar en la cárcel.

Carlos Irwin Estévez, más conocido como Charlie Sheen (nacido el 3 de septiembre de 1965 en Ciudad de Nueva York) es actualmente una de las figuras mejor pagadas de la televisión. Según Los Angeles Times, cobra más de 875.000 dólares por cada capítulo de la serie Two and a half Men. También conocido por películas como Wall Street o Platoon, el actor es considerado un enfant terrible de Hollywood. En los años 90 luchó contra su adicción a las drogas y llegó a ser internado por una sobredosis. En 1995 saltó a los titulares después de que una mujer lo denunciara por lesiones corporales.

Sheen y su ex novia Paula Profit tuvieron una hija, Cassandra Jade Estévez. Sheen y Profit nunca se casaron. En 1990, Sheen accidentalmente disparó a su entonces novia, Kelly Preston, en el brazo. La relación terminó poco después de eso.

En 1995 testificó en el juicio de Heidi Fleiss, donde se reveló que él gastó 50.000 en prostitutas en 14 meses. Además, Jason Itzler, dueño del famoso servicio de escort NY Confidential, declaró en marzo de 2008 que Sheen pagó 20.000 dólares por los servicios de dos prostitutas, una de las cuales fue Ashley Dupre, del escándalo de prostitución de Eliot Spitzer. Sheen negó todas las acusaciones. Estuvo casado con Donna Peele desde 1995 hasta 2006.

Luego se casó, por tercera vez, con la actriz Denise Richards el 15 de junio de 2002. Con Richards tuvo dos hijas. En marzo Denise solicitó el divorcio. Año y medio después del divorcio se casó con Brooke Mueller con quien ha tenido gemelos.