Cancela su reserva en un restaurante y escribe la reseña más surrealista que se recuerda

Poner a un local de hostelería una estrella (de un máximo de cinco) en las reseñas de Google puede hacerle mucho daño, porque le baja la nota y eso puede llevar a otros posibles clientes a renunciar a acudir allí, porque cada vez son más los clientes que se informan de las experiencias de quienes han ido previamente antes de tomar una decisión.

Por ello es importante que quienes escriben esas opiniones sean justos y no se dejen llevar por un detalle puntual para tratar de hundir la reputación de un restaurante. Es cierto que puede haber locales que merezcan esa puntuación mínima, pero en otros casos esa estrella solitaria no está justificada.

Reseña absurda en Bilbao

Así lo ha vuelto a demostrar la popular cuenta Soy Camarero, que lleva el profesional de hostelería Jesús Soriano y que comparte todo tipo de situaciones que se viven en su sector. En este caso ha publicado la captura de una reseña que ha escrito, puntuando con una estrella, una persona que había reservado mesa el pasado domingo para cenar en La Taberna de Zarate, un restaurante de Bilbao, y que no puede ser más surrealista.

“Llamé hoy sobre las 21.00 para cancelar una cena que tenía reservada y cuál es mi sorpresa que al poco de cancelar me entero que mi mesa ha sido asignada a otros clientes!! Qué menos que ya que no pude ir por motivos personales esa mesa se quedase vacía por respeto a mi situación personal y emocional!! No me parece que hicieran negocio a costa de mi problema”, comienza escribiendo.

Y para rematar, relata un caso que vivió en otro local. “Una vez cancelé mesa en el Serantes y me dijeron que no me preocupase, que mi mesa no sería asignada a ningún cliente, como así me aseguré, creo que deberían aprender de ellos”, termina.

La respuesta del restaurante

“La reseña más extraña y la respuesta más sublime”, titula el post Jesús Soriano, y no le falta razón, porque el restaurante no se quedó callado ante semejante opinión. “Muchas gracias por tomarse la molestia de informar de lo ocurrido. Le pedimos disculpas por la enorme falta de consideración hacia usted. Evidentemente la empresa ha iniciado una investigación para depurar responsabilidades. De momento ya ha sido ejecutado el camarero que tuvo la osadía de sentar en la mesa que usted tan amablemente anuló a última hora a otras personas sin tener en cuenta sus sentimientos", comienza la respuesta.

La parte final de la contestación a la reseña no baja el nivel. "También la mesa (4 sillas incluidas) ha sido hecha astillas y quemada en la plaza del pueblo para que nunca más nadie pueda utilizarla y así manchar su honor herido”, escribe tirando de ironía. En apenas un día el post ha alcanzado más de 130.000 visualizaciones.