Los bulos y la desinformación están a la orden del día, y el enorme poder que tienen las redes sociales lleva a que esas falsedades alcancen a un gran público y haya muchas personas que se las crean.

Nadie, o casi nadie, escapa a esta plaga. Ni siquiera el papa Francisco, que lleva unas semanas siendo más noticia que nunca por su delicado estado de salud, que le llevó a ingresar en el hospital Gemelli de Roma el 14 de febrero con una neumonía bilateral y diversas complicaciones, aunque parece que poco a poco va mejorando.

Rumores y fotos falsas

En los días en los que se encontró en estado crítico surgieron numerosos comentarios en redes sociales que especulaban con que el Pontífice argentino ya había fallecido y que se estaba ganando tiempo ocultando su muerte para poder preparar su sucesión con mayor tranquilidad. Todo ello pese a los continuos partes médicos que lleva ofreciendo el Vaticano desde el ingreso de Bergoglio.

Pero no sólo han aparecido comentarios, especulaciones y mentiras sobre su salud, también fotografías falsas, como la que ha circulado estos días del Papa tumbado en una camilla con sotana y solideo blancos y con un respirador que le cubre la boca y la nariz. La imagen se ha compartido en las redes sociales más potentes (Facebook, Instagram, X, TikTok y Threads) y con titulares ambiguos o incompletos que tratan de que el lector clique pensando que Francisco puede haber muerto.

Imagen creada con IA

Esa foto del Papa con respirador no es real, sino que está realizada con inteligencia artificial (IA), que permite hacer pasar por reales imágenes que nunca han existido. Según explica Efe Verifica, hay numerosas razones que llevan a pensar que la fotografía es falsa.

En primer lugar, que puede comprobarse que no ha sido difundida por la Santa Sede ni publicada en ningún medio internacional de prestigio ni agencia de noticias. Pero es que además hay elementos sospechosos en la imagen. El crucifijo que lleva el Pontífice en el pecho no tiene un aspecto rígido, y la cadena que lo sostiene parece partida o abierta.

Algunos elementos sospechosos de la imagen, marcados con círculos.

Algunos elementos sospechosos de la imagen, marcados con círculos. Efe Verifica

Además, no parece creíble que el respirador pueda estar fijado a su rostro sin la ayuda de gomas o de otro sistema que permita que esa máscara no se mueva ni caiga. Por último, en lo poco que se ve de la habitación en esa supuesta foto se aprecian elementos con fallos, que no mantienen una forma homogénea o una línea recta, que es algo que suele suceder cuando las imágenes se retocan o se crean artificialmente.