El Baskonia recibirá este viernes a partir de las 20.30 horas la visita del París Basketball, una fecha señalada en el calendario de la afición azulgrana por el izado del palmarés que tendrá lugar durante el descanso, pero también por el atractivo de medirse al equipo revelación de la primera vuelta de la Euroliga, que de la mano de la leyenda baskonista Tiago Splitter está deslumbrando al continente.
Incluso el conocido entrenador y comentarista de Movistar+ Piti Hurtado, que tuvo la oportunidad de ver al conjunto parisino en acción en pretemporada y que entrevistó extendidamente al técnico brasileño en la mencionada plataforma, reconoce que no esperaba el altísimo rendimiento que está ofreciendo el equipo en su temporada de debut en la Euroliga.
“Luego nos las damos de expertos, pero la realidad es que cuando yo vi a esa plantilla que había brillado en la Eurocup pensé que le iba a penalizar la ausencia de físico interior y sobre todo de experiencia en la Euroliga y talento demostrado a altísimo nivel. Sin embargo, es evidente que ese factor lo han salvado con otras cualidades”, explica Hurtado a este periódico.
En su opinión, “nadie se esperaba este éxito. Quizás sólo el bloque de jugadores que venía de hacerlo bien en Eurocup en el Bonn y luego en París podía tener esa inercia y esa confianza. Los que se han ido sumando e incluso el propio Splitter eran optimistas, pero seguro que no esperaban esto”.
Su estilo, basado en jugar a un ritmo vertiginoso y lanzar en los primeros segundos de las posesiones, se ha visto en ocasiones anteriores en la NBA con ejemplos como la época de Run TMC a principios de los 90 en los Warriors o el Seven Seconds or Less (siete segundos o menos) que implantó en los Phoenix Suns y los Houston Rockets Mike D’Antoni, con quien coincidió Splitter en Brooklyn. En la Euroliga, sin embargo, es toda una novedad.
“Tendría que pensar mucho para recordar algo parecido. Ha habido equipos muy anárquicos como el Khimki y esos tiros de Alexey Shved nada más llegar a cancha contraria, pero era otra cosa, más individualista. Lo que define a este París Basketball son esas posesiones cortas y creer en lo que hace el compañero. Tienen una mochila emocional muy liviana, nadie se molesta porque alguien se juegue un mal tiro o lance cuando no le toca”, explica.
“Lo que define a este equipo son las posesiones cortas y creer en el compañero; tienen una mochila emocional liviana”
En cualquier caso, el conjunto francés es mucho más que un equipo que juega rápido. El entramado táctico que ha tejido Splitter en París va más allá. “Siempre pensamos en el ataque y la defensa como dos departamentos estancos y ellos son capaces de ejecutar ese tiro temprano y luego cargar el rebote como animales”, apunta Hurtado.
Según el analista, uno de los aciertos de Splitter ha sido adaptarse a la plantilla y la base que se encontró en lugar de forzar que el equipo se adaptara a él: “Hay una parte táctica que Tiago ha heredado de la labor que hizo el anterior entrenador Thomas Iisalo y ha acomodado a su forma de pensar. Yo creo que es inteligente que el ego no domine el funcionamiento de un grupo cuando está siendo positivo, y los resultados le dan la razón”.
Claves de su juego
Profundizando en el estilo de juego, Piti Hurtado aclara que “el triple es importante, pero por ejemplo TJ Shorts está dominando sin necesidad de meter desde fuera”, algo que “tiene mucho que ver con que ocupan muy bien los espacios, tienen mucho acierto y una convicción enorme”. En las ocasiones en las que el rival repliega, desarrollan “un juego corto, de bloqueo directo, con los jugadores muy abiertos y con un cinco muy móvil. A partir de ahí corren antes incluso de tirar y su carga del rebote ofensivo es fundamental para un juego que es dinámico en todos los segundos de la posesión ofensiva y defensiva”.
Otro de los rasgos distintivos de Splitter son sus rotaciones, ya que es el técnico que más sustituciones realiza de toda la Euroliga y además se caracteriza por realizar sus cambios al mismo tiempo, sustituyendo a cuatro jugadores e incluso al quinteto al completo.
“Es algo que tiene que ver con el nivel de energía que se pide para jugar a ese ritmo y el preparador físico, que es catalán, también tiene un peso específico. Él valora cuántos minutos seguidos puede disputar el jugador a esa velocidad”. Perfiles como Sy, Kratzer o Cavaliere participan habitualmente para que se pueda mantener esa frescura durante los 40 minutos.
“Ellos están utilizando jugadores que realmente la mayoría de equipos de la Euroliga no los habrían fichado y están rindiendo. Todos ellos saben cuál es su función y la juegan a toda velocidad. No hacen un mal balance defensivo, no ponen una mala cara, e incluso cuando tienen un parcial negativo todo el mundo sigue trabajando. Eso tiene que ver con unas reservas energéticas muy medidas y de ahí vienen todas esas rotaciones”, argumenta.
“La mejor virtud de Splitter ha sido entender al grupo y no querer imponer una forma de hacer las cosas”
En definitiva, Splitter “piensa más en el bien del equipo que en mantener en pista a un jugador porque está en racha”. Tal vez las excepciones sean sus máximos anotadores TJ Shorts y Hifi, que sí que sobresalen por encima del resto, pero incluso ahí el París Basketball es diferente: “Fíjese, Hifi es el segundo máximo realizador, pero es el sexto jugador en cuanto a minutos en cancha. Por lo cual, tampoco es un factor el hecho de jugar más o menos, sino que tienen claro que la energía la tienen que poner el tiempo que están en pista. Si quieren jugar a un alto nivel de energía ofensiva y defensiva no pueden tener a jugadores diez minutos seguidos en pista”.
Más Popovich que Ivanovic
En alguna ocasión Splitter ha dejado claro que no le gusta que le comparen con Gregg Popovich ni con Dusko Ivanovic, sus dos principales referentes como técnicos por el tiempo que compartieron en los San Antonio Spurs y en el Baskonia respectivamente, aunque Piti Hurtado ve más similitudes con el primero de ellos.
“Él me dijo claramente que Popovich había sido el mayor referente de todos los entrenadores que había tenido, que no son muchos pese a su larga carrera. De él dice que lo que aprende es a estar muy cerca del jugador, cogerlo por el hombro, interesarse por él y pensar que tiene una vida en la cancha, pero también fuera”, destaca.
Esa parte humana del técnico brasileño, además, es muy creíble porque “sí que parece una persona para nada endiosada, que lo ha pasado mal como jugador por cuestiones físicas y familiares –su hermana falleció mientras él jugaba en el Baskonia– y que tiene claro que no se puede tratar a los jugadores como robots. Él ha entendido al jugador individualmente y al grupo, y creo que es la mejor virtud que ha tenido en su llegada a París. Para nada ha querido imponer una forma de hacer las cosas”.
Incluso se mantienen los divertidos bailes y rituales previos al partido que el grupo de jugadores que llegó desde el Bonn sigue haciendo. “Lo de imponer un aire militar se ha terminado. Es verdad que es más fácil decirlo cuando estás en la ola de la victoria, pero creo que incluso cuando llegue una mala racha mantendrán esos hábitos”, opina Hurtado.
Dudas a largo plazo
Aunque ya han cumplido con creces en una primera vuelta de la Euroliga en la que llegaron a encadenar 10 victorias consecutivas, la gran duda ahora es si podrán mantener este nivel y, en caso de llegar al play off, competir contra los gigantes del torneo con este estilo de juego tan peculiar.
“Esa es la gran pregunta. Esta competición es muy exigente, llegar arriba al ecuador ya es increíble y si se mantienen tendrán que jugar un play off que es lo más duro para un equipo con una plantilla corta. Siempre pueden llegar lesiones y ellos aún no han tenido ninguna de sus jugadores importantes”, subraya. Eso sí, “una hipotética Final Four sí les beneficiaría, porque es a un solo partido y ahí la presión iría al equipo en teoría favorito”.
Llegue a donde llegue este París Basketball a final de temporada, cuando “ya no será una sorpresa para rivales que tal vez se han confiado al principio”, el conjunto francés ha supuesto un soplo de aire fresco para la Euroliga. Splitter ha construido un equipo y una filosofía que no se había visto antes en el máximo torneo continental y que, según apunta Hurtado, “sólo es posible en un club nuevo como el París”, ya que “los clubes que han tenido éxito durante muchos años tienen una serie de ejecutivos que han hecho las cosas de una forma y cambiar esa forma de obrar después de tanto tiempo es muy complicado”.
Pese a ello, no descarta que algún día pueda llegar a entrenar al Baskonia, deseo que ya mostró el brasileño en una entrevista concedida en el periódico. “Yo creo que se adaptaría a la plantilla que hubiera, aunque intentaría cambiar una serie de cosas desde dentro. Él tiene una base muy ganadora, llegó a cuatro Final Four seguidas y ganó títulos nacionales con el Baskonia, pero es una persona muy inteligente emocionalmente y eso es fundamental porque hay clubes que se adaptan menos, que tienen una forma de hacer, y creo que Tiago sí sería capaz de adaptarse a distintos clubes”, asegura. De momento, habrá que conformarse con ver al querido exbaskonista este viernes en el banquillo rival del Buesa Arena, pabellón al que seguro que regresa en los próximos cursos si sigue haciendo las cosas tan bien en la Euroliga.