El futuro de Codi Miller-McIntyre, uno de los pilares de la plantilla del Baskonia cuyo valor en el mercado creció enormemente el pasado curso, apunta a estar lejos de Vitoria la próxima temporada.
En efecto, el base de Carolina del Norte tiene una oferta del Estrella Roja que le permitirá salirse del contrato que le ata al club azulgrana hasta el verano de 2025, tal y como ha informado esta mañana el periodista Donatas Urbonas en el portal BasketNews.
Según esta información, el conjunto de Belgrado está ultimando un acuerdo con el director de juego azulgrana para las dos próximas temporadas, previo paso a su marcha de la capital alavesa.
De confirmarse la noticia, el cuadro balcánico debería pagar una compensación económica a la escuadra gasteiztarra, ya que Codi Miller-McIntyre tenía aún contrato en vigor con el Baskonia tras haber firmado el pasado verano una vinculación por una temporada más otra opcional, que ya ejecutó la entidad de Zurbano.
Ingreso económico
De este modo, el inquilino del Buesa Arena conseguiría un pellizco económico, pero por el camino perdería a uno de sus jugadores más importantes, llamado a ser uno de los pilares del nuevo proyecto.
No en vano, Codi Miller-McIntyre fue un jugador clave para Dusko Ivanovic la pasada temporada hasta el punto de jugar casi 30 minutos de media por partido tanto en la ACB como en la Euroliga ante la falta de un suplente de garantías.
El director de juego estadounidense con pasaporte búlgaro aterrizó en Vitoria-Gasteiz el pasado verano sin hacer mucho ruido y destinado a ejercer el rol de segundo base como suplente de Nico Mannion.
Las escasas prestaciones del italiano y la dificultad de encontrar un uno de garantías en el mercado empujaron a Codi Miller-McIntyre al rol de titular y respondió extraordinariamente, rindiendo muy por encima de las expectativas y siendo uno de los principales responsables de alcanzar el play off de la Euroliga.
Su imponente físico, sus cualidades defensivas, su visión de juego y su capacidad para dejar rivales atrás con su potencia a cancha abierta lo convirtieron en la revelación de la Euroliga, competición en la que acabó como el máximo asistente.
Para el recuerdo de su más que brillante temporada quedará el estratosférico triple doble logrado ante el Asvel Villeurbane, con récord de asistencias incluido -20 asistencias, 11 puntos y otros tantos rebotes-.
Todo ello sin olvidar el compromiso mostrado en todo momento, ya que se dejó hasta la última gota de energía, soportó rotaciones casi sobrehumanas y jugó a través de sus molestias en el hombro durante gran parte del curso.
Nueva reconstrucción en el puesto de base
El sobresaliente rendimiento ofrecido por Miller-McIntyre convenció al club vitoriano para extenderle una oferta de mejora y ampliación de contrato acorde a sus prestaciones y a su rol en el equipo. De hecho, el director deportivo Félix Fernández adelantó que el Baskonia iba a ser "ambicioso como en los casos de Howard y Sedekerskis".
Sin embargo, su esfuerzo a la hora de retenerle no ha sido suficiente ante la fuerza de la propuesta llegada desde Belgrado. El jugador, que a sus 30 años y tras una carrera llena de altibajos -reconoció que llegó a plantearse la retirada hace un año- está ante la oportunidad de firmar el contrato de su vida y todo indica que se decantará por la oferta del Estrella Roja.
De confirmarse su marcha, los planes del Baskonia se verán trastocados, ya que la entidad de Zurbano deberá rastrear el mercado para suplir un hueco que, a priori, parece difícil de llenar. Son imprescindibles dos bases del máximo nivel para que el equipo trate de seguir peleando por los objetivos. Por desgracia, en las últimas temporadas a la dirección deportiva le está costando encontrar jugadores solventes para el puesto y, cuando los encuentra, duran poco en Vitoria.
Con este serán cuatro veranos consecutivos en los que el conjunto alavés se tiene que reponer a la marcha de su mejor base. En 2021 perdió a Pierria Henry, en 2022 a Wade Baldwin, en 2023 a Darius Thompson y ahora a Miller-McIntyre.
Por el camino se han quedado bases poco convincentes como Colom, Granger, Kurucs, Heidegger, Mannion, Chiozza y Theodore. Si se confirma el adiós de Codi, el Baskonia se enfrentará de nuevo al complejo escenario en el que deberá reconstruir por completo su dirección de juego con los grandes equipos de la Euroliga siendo muy agresivos en la contratación de bases en un mercado escaso.