Tiago Splitter será el indiscutible protagonista en los prolegómenos del encuentro, pero una vez se lance el balón al aire tras el salto inicial el Baskonia deberá aparcar cualquier tipo de sentimentalismo derivado de la retirada de la camiseta de la leyenda brasileña para centrarse en la búsqueda de una victoria imprescindible ante el Bàsquet Girona.
Para cuando salte a la pista, el equipo dirigido por Dusko Ivanovic ya conocerá el resultado de su principal rival por la última plaza del 'play off' por el título.
El Manresa de Pedro Martínez juega este domingo a partir de las 12.30 horas de la mañana en el Príncipe Felipe ante un Casademont Zaragoza que todavía no está matemáticamente salvado y, por lo tanto, deberá dar el do de pecho al amparo de su afición para llevarse la victoria y, de paso, hacer un favor al Baskonia.
Y es que los alaveses llegan a esta recta final de la fase regular de la competición doméstica en una situación límite. Tras jugar con fuego durante muchos meses y ver cómo el cansancio de la Euroliga le pasaba factura teniendo en cuenta su limitado fondo de armario para afrontar dos competiciones tan exigentes, el Baskonia se halla casi obligado a hacer un pleno en las tres jornadas restantes.
En caso contrario, corre el serio riesgo de quedarse fuera de las series finales por el título por primera vez desde la creación de la ACB. Sería un revés mayúsculo y una puñalada para el prestigio de la entidad de Josean Querejeta, que meses atrás tampoco participó en la Copa del Rey.
Salvo pleno del Manresa, que también debe recibir en el Nou Congost al Bilbao Basket y rendir visita al Santiago Martín de Santa Cruz de Tenerife, tocará ganar este domingo y puede que salir airoso de la doble confrontación de la próxima semana ante el Murcia en casa y el Real Madrid en el WiZink Center con el fin de no decir adiós de forma prematura a la temporada un 12 de mayo.
El Girona, casi salvado
Una vez cerrada la brillante andadura continental, el Baskonia recibe a un Girona que acaricia la permanencia tras su reciente triunfo ante el Bilbao Basket por 81-68 liderado por el base Ike Iroegbu (21 puntos y 22 de valoración).
El conjunto gerundense, al que los vitorianos derrotaron con relativa comodidad en la ida en Fontajau (85-93) y que en enero contrató a Fotis Katsikaris tras el cese de Salva Camps para frenar su caída libre, tampoco se encuentra en un momento boyante de juego y resultados. De hecho, antes de su trascendental victoria ante los vizcaínos el rival azulgrana había encadenado cinco derrotas consecutivas frente al Manresa, Unicaja, Tenerife, Barcelona y Joventut.
Moneke seguirá una jornada más en el dique seco, algo que permitirá a Theodore mantenerse dentro del 'roster' alavés. Eso sí, el base con pasaporte macedonio se ha convertido en una pieza completamente residual para Ivanovic en el timón, donde Miller-McIntyre continúa sometido a un desgaste sobrehumano partido tras partido.
El Bàsquet Girona cuenta con rostros conocidos entre sus filas como el exbaskonista Quino Colom, Sergi Martínez –cedido por el Barça– o dos jugadores con experiencia Euroliga como los interiores Ives Pons y Khem Birch, con pasado en el Asvel y Olympiacos respectivamente.
Hace poco ha incorporado a otro base como Gabe York para sustituir a Kenny Chery, aquejado de una lesión de rodilla. El estadounidense ha aterrizado en Fontajau procedente del Ignite de la G-League, donde esta temporada ha promediado 15,9 puntos, 4,7 rebotes y 3,5 asistencias.