Un Baskonia irreconocible sufrió en Milán un duro traspiés al verse superado por un Armani lastrado por sus bajas que se impuso con merecimiento a los alaveses gracias a su mayor intensidad, concentración y juego coral. Los hombres de Ivanovic entraron excesivamente relajados al partido, se vieron sorprendidos por la inspiración de Voigtmann, Melli y Flaccadori y después fueron incapaces de echar por tierra la brecha conseguida por los locales, que llegó a alcanzar los 24 puntos en el tercer cuarto. La ansiedad y la precipitación pasaron factura al Baskonia, que mostró una de sus peores versiones desde la llegada de Ivanovic y dejó escapar una oportunidad de oro de sumar un triunfo ante un equipo muy tocado.

A los alaveses, que comenzaron el duelo con su habitual quinteto con Miller-McIntyre, Marinkovic, Sedekerskis, Díez y Kotsar, se les atrancó el arranque del encuentro, en el que el exbaskonista Voigtmann, ante la ausencia de las estrellas locales Mirotic y Shields, se echó el juego ofensivo de los italianos a su espalda e hizo mucho daño anotando y asistiendo por dentro y fuera para conseguir una primera ventaja de 9-2 que obligó a Ivanovic a pedir tiempo muerto. Ni su charla ni los cambios en la alineación tuvieron el efecto deseado, ya que el Baskonia siguió desnortado y el Armani mucho más intenso en defensa y eficaz en ataque, logrando alcanzar los dobles dígitos de ventaja en el ecuador (14-3). Tuvo que ser Chris Chiozza quien con su ingreso aportara una dosis de creatividad al ataque, algo que sirvió para reducir ligeramente la brecha al término del primer cuarto (20-12).

Ese esfuerzo, sin embargo, se quedó en nada con otro desastroso comienzo de cuarto, ya que tres robos seguidos de Tonut, sin obviar la colaboración visitante, supusieron canastas fáciles en transición y que el 26-12 subiera al marcador. Reaccionaron tras ello los alaveses, que a base de acciones individuales de Sedekerskis y Marinkovic lograron limitar sus pérdidas y encontrar regularidad en anotación, pero fueron incapaces de contener a un Armani Milán más asociativo e impulsado por el acierto de Flaccadori y Melli, que se sumaron a Voigtmann como principales bazas de los italianos. Así las cosas, ambos equipos se fueron intercambiando golpes y la diferencia apenas se movió hasta el descanso, al que se llegó con un 46-31 en el marcador que ponía las cosas muy difíciles para el Baskonia.

Sin capacidad de reacción

Necesitaban los vitorianos una segunda parte inmaculada para tener alguna opción de darle la vuelta al encuentro, pero no fue el caso y el guión del encuentro se mantuvo al regreso de vestuarios. Howard abrió la lata desde la línea de personal, pero acto y seguido llegó un parcial de 11-0 favorable al Armani Milán que dejó a los vitorianos pendientes de un milagro. Voigtmann, una auténtica pesadilla durante toda la noche repartiendo juego y haciendo valer su superioridad física como alero improvisado, siguió a lo suyo y, tras un triple del alemán y una bandeja de Melli a pase de Hines, los hombres de Messina se vieron con una casi definitiva ventaja de 24 puntos (57-33) con aún un cuarto de hora por disputarse. Sin embargo, el Baskonia, liberado quizás de su ansiedad y precipitación al verse perdedor y con un quinteto más alto, aprovechó los minutos de descanso de Voigtmann y de relajación de los locales para, sin hacer mucho ruido, encadenar un parcial de 1-15 y llegar al cuarto decisivo con todavía alguna esperanza de remontada (60-48).

Pese a ello, el Armani Milán, de nuevo con los titulares sobre la cancha, no perdió la calma y gracias al temple de sus veteranos puso freno al buen momento del Baskonia, que quiso remontar demasiado rápido y volvió a caer en la precipitación. Los locales estiraron su renta hasta el 67-50, pero los hombres de Ivanovic se negaron a tirar la toalla y se colocaron a diez puntos a base de ser agresivos atacando el aro rival. Con ese marcador de 67-57 los alaveses tuvieron varias oportunidades de meterse en el partido aprovechando unos malos minutos en ataque de su rival, pero en unas ocasiones por mala fortuna, en otras por malas decisiones y en otras por la inconsistencia arbitral, no lo lograron y el Armani Milán sentenció en cuanto tuvo la oportunidad, con mención especial a un mate de Voigtmann sobre Costello con el que el exazulgrana redondeó su brillante actuación.

Estadística del Armani Milán

Estadística del Baskonia