Vitoria - La épica victoria facturada en Tel Aviv ya es historia y el trajín competitivo continúa su curso para un Baskonia obligado esta tarde a cambiar nuevamente el chip. Tras el subidón que produjo la victoria ante el Maccabi, llega otro examen algo menos atractivo en la ACB frente al Iberostar Tenerife que puede servir para concretar de forma virtual la vitola de cabeza de serie en la próxima Copa del Rey.

Antes del salto inicial, las reservas están justificadas. El equipo vitoriano deberá luchar en primera instanvia contra su propio cansancio, derivado no solo de la áspera batalla física en Israel sino también del pesado desplazamiento que debió afrontar desde la madrugada del mismo viernes para aterrizar ayer al mediodía en la isla. Por si ello fuera poco, espera con las uñas afiladas y más descansado un Iberostar convertido otra temporada más en una de las revelaciones ligueras. La solidez del anfitrión chicharrero, cada vez más asentado en la ACB, con la Copa en el punto de mira y que vuelve a opositar a objetivos ambiciosos tras sellar el pasado verano la ansiada vuelta de Txus Vidorreta a su banquillo, también deberá ser tenido en cuenta por un Baskonia con infinidad de kilómetros a sus espaldas y que inició ayer un pequeño periplo de seis días por tierras insulares hasta el próximo miércoles.

Y es que la velada de esta tarde se encuentra intercalada entre el partido de Tel Aviv y una nueva jornada de Euroliga que enfrentará dentro de 72 horas a los vitorianos ante el Herbalife en el Gran Canaria Arena. Pese a que la Euroliga es la prioridad absoluta, el Kirolbet no pretende dejar de lado una ACB donde se mantiene como algo más que una alternativa al poder establecido.

El Baskonia ha firmado hasta la fecha un expediente casi inmaculado en el frente doméstico. Tras aprovechar las bondades de un plácido calendario, es el único que sigue el ritmo impuesto por Barcelona y Real Madrid. Los dos solitarios borrones azulgranas tuvieron lugar en las visitas a Burgos y Andorra. El de Santa Cruz de Tenerife es el primero de una exigente lista de compromisos que aguardan a corto plazo en la ACB, donde los alaveses todavía deben enfrentarse a blaugranas, merengues y el Unicaja.

problemas en los locales Perasovic no dispone de recursos ilimitados como otros rivales directos y, por tanto, los pesos pesados del equipo deberán seguir exprimiéndose en busca de una nueva victoria que ratifique la mejoría de las últimas semanas. Hasta tierras insulares también han viajado Miguel González y Ajdin Penava, pero es obvio que ninguno se halla en condiciones de aportar grandes cosas a un entramado vitoriano sostenido por apenas diez hombres hasta la vuelta de Patricio Garino y que en Tel Aviv añoró la aportación de varios suplentes.

Cada vez parece más claro que el núcleo duro de Perasovic está integrado por Vildoza, Janning, Hilliard, Shengelia y Poirier, el mejor quinteto que el Baskonia pueda alinear sin duda hoy en día. El estado físico del Iberostar tampoco es para echar cohetes con las ausencias seguras del polaco Tomasz Gielo, del belga Pierre Gillet y del estadounidense Thad McFadden. Además, un estratega nato como Txus Vidorreta también tiene tocados a dos exteriores de relevancia: Rodrigo San Miguel, con un esguince leve de tobillo; y al argentino Nico Richotti, aquejado de una contractura en los isquiotibiales.

Con todo, el técnico vizcaíno ha sabido configurar un equipo rocoso y estable que se nutre de buenos jugadores en todas las posiciones. Ferrán Bassas, Javi Beirán, Nicolas Brussino, Tim Abromaitis y Colton Iverson deberán asumir un mayor protagonismo si se confirman todas las bajas del cuadro chicharrero, la tercera mejor defensa de la competición con apenas 76 puntos encajados de media. Únicamente el Baskonia y el Barcelona exhiben mejores guarismos en este apartado estadística que siempre permite deducir la solvencia de cualquier colectivo.

12ª jornada de la ACB. Santiago Martín (18.00 horas; Movistar).

Árbitros: Jiménez, Manuel y Merino.