vitoria - En ocasiones, las sensaciones que transmite un equipo no se corresponden con la siempre fría estadística. Algo que sería, sin duda, una excelente noticia para el Baskonia actual. Pero, por desgracia, en esta oportunidad los números del conjunto azulgrana son el fiel reflejo de los numerosos y gravísimos problemas que está mostrando sobre la pista desde que arrancó la competición. Y la consecuencia, inevitable y preocupante a más no poder, es que la escuadra de Zurbano el peor arranque de temporada de su historia a estas alturas de la campaña. Con una considerable diferencia además.

Teniendo en cuenta las dos competiciones en las que se encuentra inmerso ha disputado un total de diez encuentros, de los que únicamente ha sido capaz de ganar -y con apuros- dos. Un pobrísimo veinte por ciento con el que no contaba ni en sus peores pesadillas. Si ya de por sí el dato es suficientemente clarificador, se convierte en todavía más demoledor y se pone en perspectiva. Porque desde que con el inicio del actual siglo XXI el Baskonia comenzó a simultanear su participación en la ACB y la Euroliga nunca se había acercado siquiera a un balance tan raquítico.

Ni analizando los datos de las competiciones por separado ni tomándolas en su conjunto. Sea cual sea la perspectiva desde la que se lleve a cabo el análisis, el resultado no puede ser más dramático para la actual formación vitoriana. Comenzando por lo que probablemente resulta más preocupante en estos momentos, la Euroliga, el cuadro vitoriano nunca había tardado tanto en inaugurar su casillero de derrotas. En este ejercicio ha saldado sus cuatro comparecencias -ante Olympiacos, Maccabi, Valencia y Brose- con otras tantas derrotas, lo que mantiene instalado un preocupante rosco en su balance. Algo completamente diferente a lo sucedido en las diecisiete ediciones anteriores del torneo continental.

Porque el conjunto de Zurbano, que ha estado presente sin falta alguna en todas y cada una de ellas, contaba siempre con expedientes mucho más positivos tras la disputa de las cuatro primeras jornadas de la competición. Solamente en un par de oportunidades se acercó algo al desastre actual aunque incluso entonces -en los ejercicios 2012-13 y 2001-02- había conseguido ganar un encuentro para presentar un 1-3 en su balance de victorias y derrotas. Pero estos resultados podrían ser considerados meras anécdotas, puesto que la línea general es mucho más positiva. De hecho, se produce un curioso empate a siete entre las temporadas en las que el Baskonia sumaba a estas alturas tres triunfos y un único tropiezo y en las que su casillero reflejaba tablas entre éxitos y fracasos (2-2). Como récord positivo, aparece el lejano ejercicio 2002-03, en el que combinado que entonces dirigía Dusko Ivanovic firmó un pleno de cuatro victorias en sus cuatro comparecencias iniciales. Precisamente el polo opuesto a la situación actual, que Pedro Martínez tratará de comenzar a revertir mañana jueves ante el Panathinaikos en su segundo encuentro al frente del equipo. Es cierto que el nuevo formato de la Euroliga instaurado la pasada temporada obliga a encararar duelos muy exigentes desde el inicio mientras que el antiguo sistema de grupos deparaba caso siempre algún adversario asequible pero no lo es menos que la diferencia entre el balance de este año y los anteriores es enorme.

Algo muy similar a lo que sucede dentro de la ACB, donde el Baskonia es decimotercero con dos victorias y cuatro derrotas en su casillero particular. Unos números que únicamente había firmado previamente en una ocasión en lo que va de siglo (tiempo en el que ha compaginado siempre la competición doméstica con el más importante torneo continental). Sucedió en la temporada 2014-15 con el italiano Marco Crespi al frente del equipo y fue precisamente tras la disputa de esta sexta jornada, en la que sufrió su cuarto tropiezo liguero, cuando fue destituido para dejar su puesto al vitoriano Ibon Navarro. Sin embargo, en ese curso, el Baskonia encontró el consuelo de ganar dos de sus cuatro primeros enfrentamientos europeos.

Los siguientes números más parecidos, en lo negativo, a los actuales tuvieron lugar en los ejercicios 2013-14 y 2002-03, en los que el balance del equipo alavés reflejaba un equilibrio total entre aciertos y errores (3-3). Por contra el mejor expediente data de las campañas 2003-04 y 2006-07, con un inmaculado 6-0 en los seis capítulos iniciales del curso.

Si en la comparación de ambas competiciones por separado el Baskonia actual sale perdiendo claramente con sus predecesores, exactamente lo mismo sucede si se realiza un estudio conjunto. Bajo el mando de Prigioni, Valdeolmillos y Pedro Martínez la escuadra de Zurbajo ha logrado un pobre veinte por ciento de victorias (2/10). Exactamente la mitad de lo que era hasta el momento su peor resultado, que data del curso 2014-15 y alcanzaba el cuarenta por ciento de éxito (4/10). En lo más alto destaca el balance de la temporada 2006-07, con un casi pleno (9/10).