Vitoria - Caras largas, muy largas en el día después. La sorprendente dimisión de Pablo Prigioni como máximo responsable del Baskonia tras perder ante Valencia Basket aún revoloteaba ayer en el ambiente de la expedición que a las 10.30 partió de Foronda hasta Nuremberg (Alemania), donde esta noche jugará ante Brose Bamberg el cuarto partido de Euroliga. El estado de shock entre la gran parte del cuerpo técnico y los jugadores era palmario. Algunos de ellos habrían tratado incluso de convencer a su entrenador desplazándose a primera hora de la mañana hasta su domicilio para hacerle recapacitar, pero sin ningún éxito. La medida de Pablo Prigioni tras 125 días al frente de la nave baskonista no tenía vuelta atrás y con esa decepción embarcó el equipo hacia tierras germanas. Antes de eso habló el club o, mejor dicho, su técnico interino, Sergio Valdeolmillos, al que le tocó comerse el marrón de ser la primera voz oficial en dar la cara tras la dimisión de su colega en la noche del día anterior. Capeó el granadino la situación como pudo ante los expectantes medios de comunicación y soltó dos o tres titulares de cara a la galería que entraban dentro de lo esperado. “Hoy son los jugadores los que tienen que dar un paso adelante para afrontar la situación que vive el equipo; es cierto que hay una plantilla bastante nueva, con jugadores que acaban de llegar, pero las cosas tienen solución porque aún estamos a principios de temporada”, quiso tranquilizar el preparador baskonista. Aunque reconoció a continuación que la situación es complicada, quiso quitar hierro a la depresión existente escudándose en que este tipo de situaciones son habituales dentro del deporte profesional. “No es la primera vez que pasa en el mundo del baloncesto. Es una decisión de Pablo (Prigioni), tenía las ideas claras de lo que quería hacer y ahora hay que pensar que la liga continúa y afrontar el siguiente partido”, animó Valdeolmillos, que interpelado por las razones por las cuales el equipo se encuentra en estos momentos en una fase de juego y resultados tan mala contradijo en cierto modo a lo que días atrás fijó Prigioni cuando habló de “aspectos psicológicos y emocionales” para justificar la situación. “No creo que sea un problema de ánimo, sino de hablar con los jugadores y de que entiendan que se trata de una situación de madurez y de responsabilidad”, abundó.
minutos para mcrae De cara al encuentro de esta noche, el técnico azulgrana manifestó tener “claro lo que quiere hacer” y durante cuánto tiempo, siendo perfectamente consciente de que su designación como primer técnico en el plantel baskonista será efímera. “Hablé ayer con Pablo para intentar que no tomara la decisión, pero hay que respetar la decisión”, señaló en este sentido. Respecto al choque ante el Brose de esta noche subrayó el granadino su deseo de sumar una victoria -sería la primera del curso en Euroliga tras las derrotas ante Olympiacos, Maccabi y Valencia Basket - y también la forma en que ésta podría llevarse cabo, evitando referirse a la palabra cambios “para no herir susceptibilidades por respeto a Pablo” y porque dicho análisis “se ha de llevar con privacidad”, explicó con cierto tono de solemnidad antes de analizar la actualidad de su rival, del que de forma somera destacó que se trata de un equipo “muy físico y muy sólido a nivel defensivo”. Al tiempo, confirmó que el esperado Jordan MacRae entrará “de forma progresiva” en el equipo porque los diagnósticos advierten que puede estar con el equipo aunque no cree que vaya a jugar “una gran cantidad de minutos”, concluyó el técnico.