“Es un paso adelante en mi carrera”

De 2,01 metros y 24 años, el Baskonia presentó ayer en sociedad a un tres volcánico y rebosante de energía que estaba en la agenda de todos los transatlánticos europeos. En una hábil gestión y gracias a una oferta astronómica para las tres próximas temporadas, Josean Querejeta se adelantó a todos sus pretendientes. Aunque fue oficializado por el club al poco de consumarse la eliminación liguera en Valencia, su llegada era vox populi desde hacía mucho tiempo atrás.

Si cumple las elevadas expectativas que hay depositadas, Timma se encuentra predestinado a engrosar la numerosa factoría de jugadores que han dado el salto desde el Buesa Arena a la NBA, una aspiración desde niño que todavía puede esperar su debido tiempo. “Estoy seguro de que cada jugador que empieza a practicar el baloncesto un buen día quiere jugar allí en un futuro. El Baskonia ha producido estos años muchos que han acabado en Estados Unidos. Yo puedo crecer en Vitoria como jugador y el club me ayudará a hacer realidad este sueño. Nos beneficiaremos mutuamente, pero siempre con el equipo como mi prioridad”, enfatizó.

De la posibilidad de desarrollo en un club como el azulgrana y de las bondades de Vitoria ya le han informado convenientemente algunos compatriotas suyos como los hermanos Davis y Dairis Bertans. Cuando se lesionó el primero de gravedad en 2015 en un partido continental en Milán, el Baskonia ya le trasladó sin éxito una propuesta para reforzar el perímetro. Esta vez, en cambio, sí ha ido la vencida y la secretaría técnica se ha hecho con un tres emergente del que los informes hablan maravillas por su facilidad anotadora, su potencial atlético e incluso su polivalencia al poder ejercer como falso cuatro.

“Cuando me llegó la oferta del Baskonia, me puse muy contento. Sabía que era la oportunidad idónea para disputar la Euroliga. Aquí hay grandes aficionados, un gran club y una gran gestión. Deseaba competir al más alto nivel y por eso este es un equipo perfecto para mí. Quiero ayudar al Baskonia en cada partido”, confesó Timma, que lucirá el dorsal 6 en su camiseta.

comida con el técnico Pese a que llegó a Vitoria el pasado martes, el letón ya ha mantenido un productivo cara a cara con Prigioni sobre una mesa y mantel. “Me dio sus expectativas acerca de lo que espera de mí. Podemos trabajar muy bien juntos”, se limitó a señalar al respecto un alero que tendrá la difícil misión de ocupar el vacío dejado por Hanga, en la rampa de salida ya hacia los Spurs de la NBA.

Al contrario que otros baloncestistas nacidos en el Este de Europa, Timma no fue parco en palabras y en su discurso irradió una ambición máxima para conquistar los mayores logros a nivel colectivo. “Estoy en Vitoria para ganar todos los partidos, ya sean de ACB o Euroliga. Intentaré jugar lo más duro que pueda y me adaptaré al sistema que el entrenador quiera. He visto la sala de trofeos del pabellón y mi objetivo es llenar la habitación con un par de ellos más”, admitió.

Timma debe cumplir estos días con las obligaciones inherentes a su fichaje por el Baskonia antes de irse de vacaciones e incorporarse a la pujante selección letona, llamada a decir grandes cosas en el concierto europeo durante los próximos años ante la magnífica generación de jugadores de que dispone en la actualidad. Al margen de Timma, sobresalen los hermanos Bertans, Porzingis, Strelnieks o Pasecniks. “El baloncesto está de moda en mi país, hay grandes talentos jóvenes y en unos años seremos una selección muy potente. Algunos ya están en la NBA y otros están haciendo buenas temporadas en Europa”, concluyó Timma.