MADRID. En el encuentro inaugural de la Euroliga, Bargnani ayudó al equipo de Sito Alonso a conseguir su primera victoria de la temporada en la competición continental con 26 puntos en la victoria por la mínima ante el Efes Pilsen (85-84), donde el italiano volvió a disputar un partido de la máxima competición continental diez años después de hacerlo por última vez con el Benetton Treviso.

"Con el nuevo formato de Euroliga, sólo quedan los mejores y cada partido es una batalla real. La Euroliga es una gran competición y cada partido es muy duro. Todos los partidos son difíciles porque hay que dar lo mejor para ganar", confesó Bargnani en una entrevista concedida a la Euroliga.

En este sentido, el exjugador de los Toronto Raptors y New York Knicks, entre otros, reconoció que como jugador profesional gusta cuando se enfrenta "a los mejores equipos y los mejores jugadores". "Cada uno de los encuentros es una experiencia nueva para mí después de estar ausente durante tanto tiempo", detalló.

Cuestionado sobre las diferencias entre la NBA y la Euroliga, detalló que ambos "son únicos en sus propios caminos, con aspectos positivos y negativos de ellos". "Los aficionados tienen formas completamente diferentes de animar. Me gustan los dos: no es que yo prefiero algo más que otra. Son experiencias diferentes y a la vez sorprendentes", detalló.

Respecto a la victoria ante el Efes Pilsen, el pívot reconoció que fue "extremadamente difícil ganarles". "Efes es un equipo muy bueno, al que ganamos por un sólo punto. Fue genial para jugar delante de nuestros seguidores y muy emocionante comenzar con victoria la Euroliga", confesó.

Ahora, Bargnani recalcó que viajan a Kaunas "para jugar un partido duro contra un buen equipo".

"No hay partidos fáciles y cada equipo es un reto diferente. Tenemos que mirar adelante a cada partido", advirtió al respecto.

A nivel personal, el pívot aseguró que no le gusta definirse "como el jugador más importante del equipo porque el equipo es lo primero". "Todo el mundo tiene un papel importante y su propia responsabilidad. Soy un jugador importante, pero nunca dije que era el más importante y no me gusta definirme de esa manera", explicó.

Bargnani, que elogia a los "expertos y muy apasionados por el baloncesto" aficionados que llenan el Buesa Arena, sabe que afrontarán "un tramo de partidos difíciles" con tres salidas en sus próximos cuatro partidos a Kaunas, Madrid y Belgrado.

Finalmente, el italiano no se pone metas con su nuevo equipo, que está intentando "mejorar" en estos momentos y con el que tratará de ganar "tantos partidos como sea posible". "Hemos empezado a nuestro ritmo y vamos a seguir construyendo nuestra química del equipo", sentenció.