vitoria - Pese a haber colocado con extrema facilidad el 1-0 en la eliminatoria, el Baskonia no se fía ni un ápice de un Panathinaikos que difícilmente lo hará hoy peor que el miércoles cuando tendió una alfombra roja para el lucimiento del conjunto vitoriano a partir del segundo cuarto. La conciencia generalizada dentro del vestuario azulgrana es que los griegos venderán esta vez más cara su piel con el fin de no asomarse al abismo de tener que ganartres partidos consecutivos si quieren acceder a la Final a Cuatro de Berlín.“Sin duda van a venir con muchísima más energía que al anterior encuentro”, reconoció ayer Bertans, autor de tan solo 5 puntos en el asalto inaugural pero que rayó a buen nivel en otras facetas del juego como la defensa y el rebote. “Estamos intentando no pensar en que somos favoritos y solo nos centramos en ir de partido en partido. Todavía necesitamos dos victorias más para cumplir el objetivo y después de esto nos llegan dos encuentros en Atenas, así que no va a resultar tan sencillo”, recordó el francotirador letón, en busca aún de su mejor estado de forma tras los diez larguísimos meses que estuvo fuera de combate tras romperse por segunda vez el ligamento cruzado de la rodilla.
A su juicio, las claves para volver a hincar el diente al Panathinaikos pasarán por que el Baskonia se mantenga fiel al patrón de juego que está posibilitando tantos éxitos desde el arranque de la temporada. “El otro día hicimos una muy buena defensa y tenemos que mantenerla mañana -por hoy- durante los 40 minutos”, insistió el báltico, quien también adelantó la necesidad de que los exteriores “ayuden un poquito más a nuestros hombres grandes” en la defensa al poderoso Raduljica, el único visitante que metió el miedo en el cuerpo al Laboral Kutxa en los prolegómenos del primer duelo.
Respecto a la posibilidad de que Hanga pueda alinearse esta noche, Bertans tampoco proporcionó ninguna pista. “Todavía no sabemos qué va a pasar con él. Ojalá pueda jugar”, se limitó a señalar. - DNA