El jugador del Laboral Kutxa Darius Adams ha repasado su trayectoria profesional en un entrevista concedida hoy al canal del club en la que se ha mostrado satisfecho de haber llegado a un conjunto con altas aspiraciones como el Baskonia.

Vitoria. "Ha sido un viaje duro, nadie me ha regalado nada", ha asegurado el base estadounidense, que ahora goza estabilidad y reconocimiento por sus cualidades de juego.

Adams, de 26 años y 1,86 metros, se formó en Estados Unidos en el Licoln College, pasó por la Universidad de Indianápolis y decidió dedicarse de manera profesional al baloncesto.

Hasta recalar en Vitoria ha pasado por equipos de Venezuela, Ucrania, Francia y Alemania. Inició la temporada 2014-15 en el Sluc Nancy del país galo hasta que en diciembre del año 2014 fichó por el Baskonia para sustituir a Thomas Heurtel, que se fue al Anadolu Efes de Turquía.

Se ha definido como un jugador "muy competitivo" dentro de la pista y ha confesado que odia perder cualquier partido. Su pasión por estar en la cancha y disfrutar del baloncesto le lleva a sentirlo como una "forma de liberar estrés y estar centrado solo en el juego y no en los problemas".

Sobre los inicios de su carrera hasta llegar a Europa ha reconocido haberse encontrado en varias ocasiones con muchas "puertas cerradas" que le hicieron difícil encaminar su trayectoria.

"Siempre he tenido que demostrar mi valía", ha reconocido Darius Adams, que gracias a ello pudo encontrar acomodo en diferentes equipos hasta recalar en Vitoria.