Vitoria - Velimir Perasovic fue claro y contundente a la hora de encontrar las causas de la derrota del Laboral Kutxa y centró sus críticas en una puesta en escena en el primer cuarto en el que el Baskonia estuvo muy lejos de ser el equipo aguerrido y agresivo que acostumbra. Unas virtudes que se pudieron apreciar después, pero que no fueron suficientes ante el acierto en la segunda parte del Iberostar Tenerife.
“Nos han ganado muy merecidamente. Hemos jugado el peor partido en lo que va de temporada. Hemos empezado pensando que el encuentro iba a caer poco a poco de nuestro lado, sin la energía y dureza necesarias para jugar. Producto de eso son dos primeros cuartos igualados, pero con malas sensaciones. Luego en el tercer cuarto queríamos y estábamos mucho más agresivos, pero Iberostar ha jugado muy bien y cuando queríamos ya no podíamos. Han metido muchas canastas de mérito cuando pensábamos que defendíamos bien y estábamos ahí y cuando se pusieron con más de diez puntos de ventaja lo vimos muy difícil y no tuvimos fuerza para remontar. Recibir 98 puntos en casa es una losa que hace imposible ganar. Siempre sacaban ventaja en el uno por uno y el dos por dos. Nos han hecho un roto y han tenido mucha ventaja”, sentenció.
El Baskonia careció de su seriedad defensiva habitual y evidenció que tiene que ir al límite para no convertirse en un conjunto accesible: “El equipo no ha tenido chispa ni agresividad. Solidez es la palabra. Y cuando no hay solidez es muy complicado. Es una derrota muy dura y una cura de humildad en nuestra cancha. Si no jugamos duro y concentrados no podemos ganar”. - DNA
Los alaveses desperdiciaron ayer una ocasión de oro para dejar casi sentenciado el billete para la Copa del Rey, aunque todavía siguen disfrutando de un colchón de tres victorias sobre el noveno clasificado. El Gran Canaria ya le ha colocado el aliento en la nuca.
