Vitoria, 7 ene (EFE).- El Laboral Kutxa afronta mañana una exigente reválida con la visita a la cancha del CSKA de Moscú en la segunda jornada del Top 16 de la Euroliga para medirse al único equipo que no ha perdido un solo partido.

Los moscovitas caminan con paso firme en el torneo, no han perdido ninguno de los 11 duelos jugados en la competición, y trabajan con la idea de adjudicarse el trofeo en la Final Four de Madrid en mayo.

Ante semejante potencia de una plantilla repleta de calidad, el Baskonia se enfrenta mañana a un buen examen en el que tiene que ofrecer una imagen de consistencia, consciente de la dificultad de un duelo lejos del Buesa Arena y de que esa cancha no es la mejor para ello.

Los de Ibon Navarro solo han sido capaces de vencer en uno de los cinco desplazamientos. Fue en la pista del Galatasaray con una soberbia actuación del defenestrado Doron Perkins, con nueve puntos en los últimos tres minutos que resultaron providenciales para lograr el pase a la segunda fase. En el resto de salidas en Atenas, Lituania, Valencia y Belgrado cada partido ha sido una derrota.

Será otra buena ocasión para ir ensamblando las nuevas piezas que se han incorporado a la plantilla como Mike James, Darius Adams y Ben Hansbrough, ante una plantilla de calidad en todas sus posiciones como Teodosic y De Colo en la dirección de juego, Weems en el perímetro y los pívots Kaun, Khryapa y Hines en la pintura.

El Baskonia comenzó con un inesperado traspié el Top 16 y cedió en el arranque en el Buesa Arena ante el Anadolu Efes, 67-72, en una mala gestión de los tres minutos finales que le dejaron sin victoria. EFE