vitoria - “Impossible is nothing” rezaba el eslogan de una conocida marca de prendas deportivas. Pues bien a esta máxima que se empeña en hacernos creer que cualquier cosa en la vida puede suceder si uno pone el máximo de su parte por conseguirla se aferra el Laboral Kutxa para mantener viva la quimera en la que se ha convertido su presencia en la próxima edición de la Copa del Rey. Después de su enésimo fiasco de la temporada -en esta ocasión en Zaragoza- conseguir el pasaporte para la cita que tendrá lugar en Las Palmas se antoja prácticamente una misión imposible pero Ibon Navarro y su tropa están obligados, como mínimo, a hacer el máximo posible para que ese, en estos momentos, increíble objetivo se torne en realidad. Y para evitar que el fuego no se apague definitivamente y poder mantener con un mínimo de vida las escasas brasas que ahora mismo lo sustentan resulta imprescindible sumar esta tarde la séptima victoria del curso en la ACB.
Un triunfo que debe producirse a costa del Estudiantes, que visita el Buesa Arena compartiendo uno de los estigmas de la escuadra alavesa. Porque, al igual que le sucede al Laboral Kutxa, el combinado madrileño todavía no conoce el éxito lejos de su propio feudo. Se antoja por lo tanto un escenario propicio para que el equipo vitoriano se sobreponga a las últimas derrotas encajadas y al cansancio acumulado en un inicio de año sin tregua y se reencuentre con lo que debería ser la normalidad en una entidad de sus características.
Sin embargo, lo normal es precisamente lo menos habitual en conjunto del Buesa Arena, por lo que bien haría en no confiarse lo más mínimo si desea evitar volver a encontrarse de nuevo trasquilado. Y es que tras tumbar en diciembre al Real Madrid y al Barcelona y perder en los últimos instantes en sus visitas al líder Unicaja, Bilbao Basket y Río Natura Monbus, los madrileños persiguen ahora asaltar el Buesa Arena y lograr un triunfo que les aleje de la zona peligrosa de la clasificación.
Continuando con el interminable carrusel de cambios en el que se ha convertido este Baskonia, la cita ante el Estudiantes servirá para que se produzca el estreno oficial del pasaporte Cotonú del base estadounidense Mike James y, en consecuencia, el debut en la ACB -el viernes lo hizo en la Euroliga- del escolta Ben Hansbrough. Ambos, al igual que Adams, aún deben acoplarse al grupo y ganando el proceso siempre es más sencillo.