vitoria - Hacía tiempo que el baskonismo no se ilusionaba tanto con un fichaje de campanillas. Deprimida por la ausencia de nombres ilusionantes en la plantilla y la imparable pérdida de competitividad de un club obligado a desprenderse de sus principales estrellas cuando asoman la cabeza, la afición del Laboral Kutxa contempla el aterrizaje de Davis Bertans en el Fernando Buesa Arena como una fresca bocanada de esperanza para poder reeditar los éxitos del pasado.

Una temporada más, la pelea por los títulos se ha convertido en una quimera para el inquilino del Buesa Arena, pero ello no es óbice para resignarse a no contemplar ya en la capital alavesa jugadores hechos de una pasta especial y con algo diferente corriendo por sus venas. Desde luego, este letón procedente del Partizan posee magia en sus manos, aunque su juventud (21 años) pueda llevarle en el futuro a completar actuaciones oscuras. Venía avalado por su desbordante capacidad anotadora y en la Ciudad Condal corroboró que es un auténtico killer.

Espigado y con una planta imponente gracias a sus 206 centímetros de altura, se encuentra predestinado a dar más pronto que tarde con sus huesos en la NBA -los europeizados Spurs de Gregg Popovich ostentan sus derechos- en un corto plazo de tiempo. Bertans tiene tres años firmados con el Baskonia, pero casi nadie cree que los cumplirá. Si le respetan las temibles lesiones, que le martirizaron en tierras balcánicas, su futuro es envidiable.

Desde aquel asombroso debut de Arvydas Macijauskas en Las Palmas en la temporada 2003-04, no se recordaba una aparición tan deslumbrante de un integrante baskonista en la Liga ACB. El francotirador lituano, ya retirado de las canchas, endosó 36 puntos y 7 rebotes -para un total de 44 de valoración- al Gran Canaria en un encuentro resuelto con victoria alavesa (79-82). Sin alcanzar esos números estratosféricos, Bertans dejó pinceladas de su indudable clase y talento en la concluyente derrota del Palau.

Pese a quedarse inédito en su auténtica especialidad, el triple, errando los dos intentos, el letón se fue hasta los 24 puntos con una estadística casi inmaculada en tiros dobles (10 de 11). No sólo lució su variedad de recursos en ataque, sino también su buena visión de juego para alimentar a los compañeros cuando sufría un férreo marcaje por parte de Abrines o Thomas. Si se exceptúa la contribución de San Emeterio en el segundo cuarto, protagonizó los solitarios brotes de acierto de un conjunto con el punto de mira desviado desde más allá de 6,75 metros.

Fruto de ello, Bertans encabeza ya la tabla de anotadores en la ACB tras la disputa de la primera jornada. Algo que no conseguía hace mucho tiempo un integrante del Baskonia. En cerca de treinta minutos de juego, el baskonista obtuvo un punto más que el alero del Andorra Betinho Gomes y el ala-pívot del Iberostar Luke Sikma, dos más que el interior del Murcia Augusto Lima y tres más que el escolta del Baloncesto Sevilla Alex Urtasun. El báltico, en cambio, no pudo erigirse en el MVP tras ser superado en valoración por Lima, Hervelle y Sikma. Únicamente queda confiar en que sea capaz de gozar de cierta continuidad en su juego y que no se disuelva como un azucarillo en próximas fechas.