Vitoria. El Buesa Arena vivirá hoy un día histórico. A partir de las 8.00 horas, y si el viento lo permite, la inmensa grúa levantada desde hace días en los alrededores del pabellón de Zurbano procederá a acometer una mastodóntica operación de microcirugía que nadie que tenga oportunidad debería perderse. A esa hora, la grúa Liebnerr 11350 extraerá la cúpula que durante los últimos años ha cobijado el hogar del Baskonia para depositarla de una pieza en el que a partir de hoy será su nueva ubicación en los aledaños del Buesa.

Bajo su techo nacerá un recinto cerrado -elevado a la altura original de la plaza de ganado- que servirá de aparcamiento y escenario de distintas actividades cuando sea necesario. Ayer, los responsables de ejecutar la operación, a cargo de la firma Usabiaga, mantenían la calma tensa innata a las horas previas a un reto de semejantes características. "Todo va según lo previsto para empezar a las 8.00 horas, pero la maniobra puede estar acabada a las 11.00 horas o prolongarse hasta las 17.00 horas", explica Álvaro Hueso Goenaga, que junto a Fernando Etxezortu serán los encargados de dirigir y gestionar la faraónica operación que tendrá lugar esta mañana en el Buesa.

En principio, si todo transcurre sin problemas, el proceso podría culminar alrededor de las 12.00 horas, pero el viento podría echar por tierra todo lo previsto y postergar el proceso durante más tiempo. "Si sube de los 8-10 metros por segundo será peligroso y no podemos jugárnosla. Va a haber mucha gente y la seguridad estará por encima de todo. Hablamos de una pieza de 230 toneladas y 58 metros de diámetro. Más vale esperar que sufrir un accidente", explican desde la empresa Usabiaga. Cuando culmine el proceso, la cúpula quedará depositada sobre sus nuevos apoyos levantados para la ocasión y el Buesa Arena quedará al descubierto a la espera del segundo gran episodio de su ampliación, situar en su techo la nueva estructura en forma de corona.