vitoria. El Baskonia disfruta de nuevo de una semana entera para preparar el que probablemente sea el partido más importante en esta recta final de la fase regular. Ganar en Madrid significa seguir soñando con la tercera plaza y, por el mismo precio, dar un golpe de autoridad ante el que, contra pronóstico, ha acabado siendo el único equipo del baloncesto español que luchará por el título continental en la Final Four de Barcelona. Pero antes de que el Real Madrid intente poner una pica en el hogar de su eterno rival deberá hacer frente a un renovado Caja Laboral. Más descansado y, en consecuencia, más relajado y fluido en su juego que el dubitativo equipo que tantas dudas ha generado a lo largo de esta temporada.
"Ahora que tenemos un partido a la semana el baloncesto parece otro deporte. La competición cambia, la dinámica cambia y la forma de trabajar cambia, y eso se nota poco a poco", admitió ayer Pau Ribas, recuperado para la causa después de enlazar actuaciones más solventes en las últimas semanas. Después de "despejar muchas dudas" con el contundente triunfo del pasado domingo frente al Bizkaia Bilbao Basket, el combo guard catalán está seguro de que, si el conjunto vitoriano es capaz de regresar de la Caja Mágica con una victoria en el equipaje conseguirá "zanjarlas todas". "Tendremos más confianza y, además, aseguraríamos el factor cancha a favor. Es una buena prueba para nosotros", aseguró Ribas, que no piensa en toparse con un rival menos motivado de lo que debería ante la cercanía de la que será su primera Final Four en quince años. "Mentalmente será difícil con una cita tan importante como tienen, pero contra un rival directo como somos nosotros seguro que quieren jugar bien. Todo el mundo quiere jugar bien contra nosotros", apuntó el exterior badalonés.
marcelinho huertas Antitético en su juego pero buen amigo del catalán dentro y fuera de las canchas, Marcelinho Huertas también se mostró confiado en poder seguir luchando por la tercera plaza en este duelo particular que Baskonia y Power Electronics Valencia han iniciado a falta de cuatro jornadas. Una persecución que, para la escuadra baskonista, pasa irremediablemente por vencer al cuadro merengue y esperar una derrota taronja.
"Tenemos que ir a ganar a Madrid porque si queremos ser terceros es la única opción que nos queda, pero ellos estarán también muy metidos porque no querrán renunciar a ser primeros", advirtió el timonel brasileño, que a día de hoy desconoce si podrá medirse cara a cara con su homólogo en el plantel blanco, el exbaskonista Pablo Prigioni, aquejado de una pubalgia. "No sé si al final estará o no, pero es un jugador que controla mucho el juego de su equipo y el fin de semana pasado contra el CAI Zaragoza le echaron en falta", recordó Huertas mientras, por su parte, Pau Ribas restó importancia a la posible ausencia del argentino. "Pablo puede que no juegue y Llull también está jodido, pero el Madrid es un equipo que tiene mucho talento y cualquiera de sus jugadores puede jugar muy bien. Al fin y al cabo es un equipo de Final Four", apuntilló el azulgrana.