vitoria. Encontrar un estilo de juego diáfano y efectivo es un reto que cada equipo debe afrontar año tras año, pero la búsqueda suele volverse especialmente intrincada cuando se pierde a jugadores clave. La temporada pasada, el Caja Laboral basaba su baloncesto en la figura de un hombre que ahora lucha por hacerse un hueco en la NBA. Tiago Splitter anotaba, reboteaba, hacía circular el balón y, sobre todo, abría huecos a sus compañeros para que éstos se lucieran de forma notable. El brasileño era el clavo al que aferrarse cuando nada funcionaba como debía. Era el referente que el Baskonia echó ayer más de menos que nunca. Pese a todo, la derrota de ayer ante el Real Madrid (67-72), por dolorosa que sea para los seguidores baskonistas, tampoco fue de las que deben hacer cundir el pánico. En un partido más bien aburrido, con dos equipos sin alma sustentados en los altibajos de juego, la escuadra dirigida por Dusko Ivanovic evidenció una vez más que sus problemas con el rebote defensivo van camino de convertirse en un mal endémico incapaz de ser arrancado juegue contra quien juegue. Ayer fue el cuadro madrileño el que asaltó el Buesa Arena con quince capturas en ataque. Antes fue el Bilbao Basket, y previamente el Cajasol. Con Barac en cancha o sin él, el Caja Laboral convirtió de nuevo su zona en una autopista que los jugadores merengues especialmente un gran Carlos Suárez que, por cierto, se llevó un feo e innecesario golpe en la cara del debutante Pape Sow aprovechaban para entrar como Pedro por su casa, recuperar balones y permitir segundas jugadas que acabaron condenando a los vitorianos. Cegados por la misma luz en el perímetro David Logan encestó el primer triple azulgrana en el tercer cuarto, después de que el equipo errara nada menos que trece seguidos ambos conjuntos decidieron que el partido iba a decidirse en la pintura. Mala elección. Con Marcus Haislip completamente fuera del partido el norteamericano se equivocó en todas y cada una de sus acciones (acabó con -7 de valoración) y un Pape Sow que se apagó tras un esperanzador arranque en el que anotó seis puntos y cogió dos buenos rebotes, el Caja Laboral quedaba exclusivamente a expensas de Barac y Teletovic. Pero ninguno de los dos tuvo su día en defensa, y el Real Madrid aprovechó para, paso a paso y sin demasiado brillo, socavar el ánimo de unos jugadores baskonistas que, incapaces de mantener un orden mínimo en los ataques estáticos, optaron por buscar su suerte en la más absoluta anarquía cuando tenían el partido controlado (66-59 con un triple de Teletovic a falta de tres minutos para el final). deslavazados en ataque De repente, cuando parecía que el Baskonia iba a llevarse el gato al agua en una batalla de errores, el equipo vitoriano se volvió loco. D'or Fischer se beneficiaba una y otra vez de los desajustes defensivos por culpa, aunque no únicamente, de un David Logan desafortunado como nunca en defensa, Felipe Reyes y Sergi Llull hicieron creer a sus compañeros que la victoria era posible, y un triple de Tucker tras un nuevo rebote ofensivo puso por delante al Real Madrid a falta de medio minuto para el final. Un golpe del que el Baskonia ya no se recuperó. Después de ir ganando de siete puntos, un parcial de 1-13 en los últimos tres minutos dejaba en evidencia al plantel azulgrana, enterrado además por dos fallos en los tiros libres de San Emeterio y Teletovic. Perdida la lucha por el liderato y a una jornada del final de la primera fase continental, el parón navideño debería servir al Baskonia para pararse a reflexionar, entre otras cosas, si el problema más grave que asola al equipo de Ivanovic desde el arranque de temporada era la ausencia de un cinco suplente para Barac o si, por el contrario, los árboles no dejaban ver el bosque y, realmente, el germen del intermitente estado de forma que atraviesan los vitorianos necesita de una reflexión que se extienda más allá de Dejan Musli o Pape Sow. Los mimbres son esperanzadores, pero a día de hoy, y como el propio Ivanovic ha admitido estos días, este Baskonia es irreconocible.

12ª jornada de Liga. Pabellón Fernando Buesa Arena (9.700 espectadores)

Parciales: 17-22; 21-9; 12-18; 17-23. Árbitros: Juan Carlos Artega, Benjamín Jiménez, Juan José Martínez Díez. Eliminados: No hubo.

PMinT2T3T1RTDOABRBPFV

4. Ribas8191/11/13/41112114

6. García

9.Huertas2221/30/111221-1

10. Logan 7232/21/511311

12. Teletovic 18355/92/72/46511213

19. San Emeterio 3291/20/51/254131124

22. Haislip40/133-7

24. Oleson2151/30/1113-2

30. Sow6102/32/34221137

42. Barac 19309/141/18621221

44. Bjelica2121/10/13-2

Equipo41315

TOTAL6720023/384/229/143122910492063