barcelona. La Final Four de 2012, más o menos en las mismas fechas en las que se concluirán las obras de remodelación del Fernando Buesa Arena, tiene prácticamente asegurada su sede. Se trata de Estambul, capital de un país donde el baloncesto goza de una excelente salud económica y donde hace sólo unos meses se celebró el Mundobasket, tal y como se desprende de la rueda de prensa que ofreció ayer el director general de la Euroliga, Jordi Bertomeu, y que sirvió como presentación oficial de la final a cuatro de la presente campaña, que se celebrará del 6 al 8 de mayo en el Palau Sant Jordi.

Bertomeu anunció que los abonos para la Final Four de la capital catalana tendrán una rebaja del 15% de media respecto al precio de la final a cuatro de Berlín, en 2009. La Euroliga, consciente de la situación económica actual, pondrá las entradas para los cuatro partidos de la final con unos precios que podrían oscilar entre los 125 y 550 euros para los abonos generales, sin contar los paquetes VIP que la Euroliga pondrá a la venta más adelante. A partir del 15 de diciembre, a través de la página web de la Euroliga, se podrán comprar las entradas.

Bertomeu espera que la final de 2011 suponga una evolución respecto a la organización del evento. "El hecho de que siempre esté lleno no quiere decir que ignoremos la realidad, queremos ayudar que la gente disfrute", manifestó sobre la rebaja del precio para las entradas.

Tras la renuncia de Turín para albergar la Final Four de 2011, y el consiguiente adelanto de la candidatura barcelonesa, las ciudades que cuentan con más números para ser sede en 2012 son Londres y Estambul. Sin dar nada por sentado, Bertomeu apuntó que la ciudad otomana es la mejor posicionada. "El hecho de que los Juegos Olímpicos en Londres 2012 se hagan dos meses después no ayuda a la Euroliga. Estambul es una evidencia más próxima que las otras cinco ciudades que barajamos", dijo. "Tienen un pabellón nuevo, es un país emergente en baloncesto y su economía está creciendo", concluyó.