Vitoria. Stanko Barac está predestinado a echar raíces en la capital alavesa. El Baskonia notificó ayer la renovación por tres temporadas más del gigante croata, cuyo vínculo expiraba el 30 de junio de 2012. Es decir, si ambas partes respetan los términos del acuerdo rubricado en los últimos días, el de Mostar permanecerá ataviado con la elástica azulgrana hasta el final de la campaña 2014-15.
Este movimiento supone una declaración de intenciones de la entidad presidida por Josean Querejeta, que ha decidido dar un voto de confianza a un jugador bajo sospecha para muchos. Esperanzado en que, ya sin la alargada sombra de Splitter, pueda explotar de una vez por todas en su tercer ejercicio en el Buesa Arena, el Caja Laboral quiere convertir a Barac en su referente interior durante los próximos años. Una apuesta hasta cierto punto lógica teniendo en cuenta la escasez de hombres altos de calidad en el mercado.
El poste balcánico, al que se ha blindado con un contrato similar al suscrito en su día por Mirza Teletovic, ya tiene despejado el camino para triunfar y disipar las dudas que existen alrededor de su espigada figura. Con 24 años y 217 centímetros de altura, todavía le queda un largo camino para erigirse en el interior dominante con el que todos los estamentos sueñan. Mediatizado en parte por los problemas físicos que le han dejado fuera de combate de las dos últimas ediciones de los play off por el título de la ACB, el poco margen de lucimiento que le consentía la presencia del icono brasileño, su querencia a cometer faltas y su fragilidad mental, su paso por el Baskonia ha dejado hasta la fecha más sombras que luces.
Esta temporada, con más minutos sobre la pista y la entera confianza de Ivanovic, Barac ha dejado destellos de su calidad y promete dar alegrías a un público deseoso de que haga valer su colosal envergadura en la zona. De momento, sus números son altamente interesantes -11,6 puntos y 7 rebotes en la ACB, por 14,5 tantos y 7 rechaces en la Euroliga-, aunque en las dos pruebas de mayor exigencia ante el Unicaja y el Fuenlabrada ha sido superado de cabo a rabo por Archibald y Batista respectivamente.
Tras esta ampliación contractual, el croata también aparca, al menos durante alguna temporada más, su posible desembarco en la NBA, donde Indiana Pacers ostenta sus derechos desde 2007 tras ser elegido en primera instancia por Miami Heat. De hecho, el legendario Larry Bird, director deportivo de la franquicia ubicada en Indianápolis, siguió en directo sus evoluciones durante la reciente gira estadounidense.
Ante la disyuntiva de que Barac pudiese seguir el mismo camino que otros pívots europeos durante el pasado verano (Asik, Erden, Mozgoz, Pekovic...), el Caja Laboral ha querido curarse en salud y atar a uno de sus estandartes de futuro.