Vitoria. La reforma del Buesa Arena encara estos días uno de sus momentos claves, a la espera de que el concurso para la adjudicación de la ayuda técnica se concrete la próxima semana. Como ya adelantó DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA, cuatro empresas de las seis iniciales pasaron el corte final, pero sólo una será la adjudicataria para llevar a cabo unas obras que, según confirmó ayer Claudio Rodríguez, teniente de diputado general, obligarán al equipo azulgrana a disputar algunos partidos lejos del pabellón de Zurbano mientras dure la misma, independientemente del proyecto que resulte ganador.

Así las cosas, y ante la imposibilidad de colocar a los nueve mil aficionados baskonistas en algún emplazamiento de la capital alavesa, la reforma implicará irremediablemente que el conjunto de Dusko Ivanovic tenga que desplazarse a otra ciudad -previsiblemente Bilbao o San Sebastián- para jugar una serie indeterminada de encuentros. "Las obras respetarán en lo posible el calendario de competición del Baskonia, pero damos por sentado que se tendrán que disputar algunos partidos fuera del Buesa Arena", aseguró Claudio Rodríguez durante su comparecencia en las Juntas Generales para explicar los escasos detalles del proyecto de reforma que se conocen hasta ahora. De hecho, se comprometió a regresar al mismo escenario dentro de unas semanas para concretar el plan definitivo una vez adjudicada la ayuda técnica.

Por el momento, la información suministrada ayer por el teniente de diputado general eran cuestiones de dominio público, como la fecha de comienzo de las obras -primera mitad de 2011-, cuándo se prevé que estén terminadas -finales de 2013-, o el presupuesto -29 millones de euros- que serán desembolsados a partes iguales por el ente foral y el Gobierno Vasco, quedando en manos del Ayuntamiento de Vitoria los aspectos relacionados con el aparcamiento y las zonas de acceso al pabellón. Asimismo, el proyecto quedará redactado para después del verano y licitado a finales del presente año.

Por otra parte, Rodríguez adelantó algunas de las exigencias que la firma que logre la adjudicación definitiva deberá cumplir a rajatabla, tanto a nivel económico como de sostenibilidad. "Nuestra preocupación es que la inversión que realicemos sea adecuada a las circunstancias, sin elementos innecesarios o de lujo. Exigiremos a la empresa un exhaustivo control del gasto, y premiaremos los aspectos relacionados con la sostenibilidad y el coste energético cero", subrayó antes de recordar que, con la retirada de la cúpula, el pabellón vitoriano "estará en disposición de acoger multitud de eventos que hasta ahora no se podían realizar al estar condicionados por la presencia de la cúpula, un impedimento para montar algunos escenarios".

Mientras la escuadra alavesa enfila el camino hacia el título de campeón en estas semifinales ante el Real Madrid, su hogar se prepara para encarar un importante paso hacia un futuro que dote al Caja Laboral de un pabellón digno del siglo XXI.