vitoria. El radar baskonista permanece atento a toda clase de jugadores susceptibles de ser fichados con independencia de lo que marque su DNI. Desde los consagrados y con la etiqueta de estrella hasta los más bisoños y los típicos diamantes por pulir, la entidad nunca se queda cruzada de brazos. Dentro de las numerosas promesas a las que el Caja Laboral suele examinar in situ en el Buesa Arena con vistas a un posible fichaje, durante los dos últimos días le ha tocado el turno a Sandro Gacic, un jovencísimo bosnio de apenas 14 años que está considerado uno de los mayores talentos de su país.

Tras aterrizar en Vitoria el pasado domingo, este imberbe baloncestista balcánico ha seguido la rutina habitual de otros muchos jóvenes a los que el club sigue el rastro. Gacic, un espigado base de 1,95 metros que milita en las filas del KK Mostar 05, ha vivido dos intensos días en Vitoria, donde ha realizado diversas pruebas físicas y técnicas, además de algunos test de explosividad. Iñaki Iriarte, el moldeador de jóvenes figuras con que cuenta Josean Querejeta, ha sido su permanente sombra antes de que ayer emprendiera rumbo a su país natal.

De momento, su posible llegada se encuentra en el aire. Si bien Gacic convence a los técnicos por sus cualidades -se piensa que, en breve, puede llegar a superar los dos metros de altura-, todavía quedan por perfilar muchos detalles. Además de conocer los resultados de las exploraciones a las que se ha sometido e intentar trasladarle una oferta que seduzca a su familia, el Baskonia deberá competir con otros clubes punteros balcánicos interesados en reclutarle para sus filas. Entre ellos figuran el Partizan, el Zeleznik, el Bosna y el Sloboda Dita. Existen precedentes en este sentido que obligan a ser cautelosos. Recientemente, el club vio frustrada la llegada del croata Darijo Saric después de que el jugador de 16 años accediera en un momento a todas las peticiones que le fueron planteadas.