vitoria. Pocas veces como ayer se ha expresado Josean Querejeta con tanta nitidez respecto al futuro de la piedra angular del actual Caja Laboral. Según apuntó ayer el presidente, el interior brasileño se debate en estos momentos entre dos únicas opciones como son continuar ligado a la disciplina baskonista o desembarcar en la NBA y hacer realidad su principal sueño como baloncestista.
"Hasta que termine la temporada, no sabremos nada", declaró en primera instancia el máximo dirigente azulgrana, que de momento apela al contrato en vigor que une al de Joinville a la capital alavesa. Su vinculación expira al término de la campaña 2011-12, si bien el jugador dispone durante este verano de una opción unilateral para romper ese pacto abonando una cantidad económica que no se aproxima ni de lejos a lo percibido en su día por el Baskonia gracias a los onerosos traspasos de otros iconos como José Manuel Calderón, Luis Scola o Andrés Nocioni.
"Todos queremos que se quede, pero también debemos entender que es un profesional y tiene que pensar en su futuro. Ojalá estime, como yo, que su futuro, donde mejor está, es en Vitoria", confesó Querejeta, que cerró de manera categórica la puerta a que Splitter emigre hacia otro club europeo ávido de contratar al que para muchos es el mejor cinco de Europa. Si bien hay conjuntos, con el Real Madrid a la cabeza, dispuestos a tentar al carioca con un oferta irrechazable, superior incluso a los grandes emolumentos que el jugador tiene firmados en el Caja Laboral, desde el club no se contempla que refuerce a un rival directo en la ACB y la Euroliga.
Las palabras pronunciadas por el mandatario lazkaoarra no pudieron ser en este sentido más elocuentes. "Seguirá en el Baskonia o, en su defecto, se marchará a la NBA. Creo que hará una u otra cosa. Él tiene un gran interés en jugar en Estados Unidos, pero aún conservo esperanzas de que continúe con nosotros".
dudas en el aire Lo cierto es que la pelota se halla en el tejado de los Spurs, el poseedor de sus derechos al otro lado del charco y que ya ha expresado por medio de su manager general, R.C. Buford, su evidente deseo de contar con los servicios del todavía integrante azulgrana. Rebasado ya el tercer ejercicio desde que entrara en la lotería de novatos, el convenio colectivo que rige en la NBA permitirá a los Spurs negociar por encima de los límites salariales previstos para cada escalón del draft.
Sin embargo, eso no parece una garantía de éxito a la hora de fraguar la operación. Sólo una tentadora oferta económica de San Antonio -según recogen medios estadounidenses no le podrá ofrecer más de cinco millones de dólares por campaña- provocará, por tanto, que Splitter cambie de aires, una hipótesis que no se contempla con excesiva claridad en el entorno del brasileño. Aquí emergen las grandes esperanzas del Caja Laboral, que aguarda agazapado su oportunidad y no descarta incluso la posibilidad de elevar los emolumentos de su capitán para mantenerse en la cresta de la ola, al menos, una temporada más.
En contra de los intereses vitorianos puede figurar el hecho de que los Spurs decidan traspasar sus derechos a otra franquicia en lo que constituya un intercambio de jugadores. Es decir, el mismo camino que siguió hace tres veranos Luis Scola, ahora en las filas de los Rockets, para desvincularse del Baskonia. De producirse eso, las opciones de que Splitter siga en Vitoria se habrán evaporado.
