barakaldo. Al margen de la Copa en sí, los más jóvenes también tienen la oportunidad de lucir sus virtudes durante estos días en el vetusto pabellón de La Casilla con motivo de la Minicopa, cuyo arranque deparó ayer por la mañana una indudable alegría para el Fundación Baskonia. El equipo dirigido por Luis Albéniz -tío del segundo entrenador baskonista Ibon Navarro- superó contra todo pronóstico a uno de los favoritos, el Real Madrid, al que batió con cierta claridad (32-42) tras un partido que dominó desde el salto inicial.

Daniel Aguirreurreta marcó las diferencias gracias a sus 16 puntos y 12 rebotes para un total de 24 de valoración. Salvo en momentos puntuales donde perdió la compostura, el Fundación no vio inquietado su éxito y dejó con la miel en los labios a todo un Real Madrid que se presentaba con promesas muy interesantes entre sus filas.

Sin embargo, la decepción aconteció por la tarde en el enfrentamiento contra otro de los cocos, un Barcelona que esta vez no dio ninguna opción (48-31) a un cuadro vitoriano demasiado tibio en los dos aros. Tras un buen comienzo, los pupilos de Albéniz fueron perdiendo gas de manera paulatina, especialmente en ataque, donde padeció serios problemas para superar a un rival con muchos centímetros en la zona. Un arrollador parcial de 16-0 en el tramo final resultaría una losa muy pesada para las aspiraciones de remontada.

De momento, el Fundación Baskonia todavía alberga opciones de acceder a la final, aunque todo pasa por derrotar esta mañana al Valencia Sunny Delight, ya sin opciones matemáticas tras perder sus primeros encuentros, y aguardar un tropiezo del Barcelona, que hasta la fecha se ha mostrado intratable y se perfila como el futuro campeón de este torneo que no se están perdiendo algunos rostros conocidos como Johnny Rogers, ahora ojeador para la NBA.