vitoria. La recuperación en activo del tobillo de Brad Oleson se paraliza en seco. Los informes médicos remitidos al Caja Laboral sobre el estado de esa zona de su pie derecho han aconsejado variar el tratamiento para no prolongar una evidente agonía. En vista de que el escolta de Anchorage convive con evidentes síntomas de dolor cada vez que se calza las botas y salta al parqúe, los galenos han recomendado evitar durante un periodo indefinido cualquier esfuerzo físico a la espera de que, con el tiempo, desaparezcan las molestias de forma definitiva.
De este modo, el recientemente nacionalizado jugador estadounidense se incluirá en la lista de bajas por lesión a partir de este lunes. El Caja Laboral, si fuera necesario, recurrirá a sus servicios mañana ante el Ayuda en Acción Fuenlabrada. Sin embargo, inmediatamente después, Oleson dejará de estar en activo hasta que los médicos vuelvan a calibrar que su estado de forma es idóneo para soportar la tensión que exige la alta competición.
La decisión se toma después de que tanto el jugador como los servicios médicos baskonistas han advertido que la rehabilitación del maltrecho tobillo se ha estancado. Dusko Ivanovic ya desveló en su día que Oleson hacía un esfuerzo máximo para ayudar al equipo. No obstante, esa voluntad de querer ser útil se cobraba un precio excesivo. El de Alaska ha demostrado sin lugar a dudas su elevada capacidad de sufrimiento. No en vano, se ha mostrado decidido a actuar con dolor. Pero, ese sacrificio a largo plazo puede ser mucho más contraproducente que la alternativa elegida: parar en seco, fortalecer la zona dañada con un tratamiento más conservador y especializado y, sobre todo, permitirse unos plazos más amplios de recuperación para que, a su regreso a la actividad, su rendimiento se acerque mucho más al que le permitió el año pasado erigirse como el jugador más valioso de la Liga ACB.
lesión en marzo y luego cirugía Y es que los últimos ocho meses han supuesto para Brad Oleson un calvario. El jugador se lesionó en su etapa con el equipo madrileño. En marzo, en plena competición, el escolta se torció el tobillo derecho y concluyó la temporada con signos evidentes de dolor.
El de Alaska, con un contrato rubricado con el Real Madrid y luego traspasado al Baskonia, quiso aprovechar el periodo vacacional para descansar, recuperarse y volver a la competición en perfectas condiciones. Sin embargo, en vista de que las molestias lejos de remitir se mantenían sin signos de mejora, Oleson consultó con un traumatólogo donde, tras una resonancia magnética nuclear se le diagnostica, según reveló ayer el club vitoriano, "una fractura osteocondral de astrágalo -uno de los huesos del pie- con existencia de un cuerpo libre en compartimento anteromedial -zona media- de la articulación, así como un edema óseo en el maleolo tibial y en astrágalo".
El pasado 18 de agosto, ya en plena pretemporada con los baskonistas tras resolverse su fichaje con el Caja Laboral, el jugador se somete a una cirugía astroscópica que le realiza el doctor Mikel Sánchez. Diferentes controles efectuados después de la intervención quirúrgica avalan que los especialistas dieran luz verde para que el jugador alternara un tratamiento en esa zona todavía dañada con el retorno a la actividad física intensa. No obstante, tres meses después, se comprueba que el tratamiento no surte el efecto deseado. Oleson, a partir de este lunes y tras cruzarse con su anterior equipo en el Buesa Arena, mantendrá ahora "un reposo" y un tratamiento conservador, "sin fecha fija de regreso al trabajo con el equipo". Los servicios médicos del club azulgrana efectuarán las preceptivas revisiones al escolta para comprobar si este nuevo tratamiento funciona de forma definitiva. En principio, el jugador no dispondrá del alta médica hasta que su tobillo vuelva a estar en perfectas condiciones.