Segundo amistoso de la pretemporada en Mendizorroza y segunda derrota para el Kutxabank Araski, que esta vez hincó la rodilla ante el Hozono Global Jairis por 65-71 en un partido donde, eso sí, dejó una mejor impresión.
Las alavesas lucharon de tú a tú ante el equipo de una vieja conocida de la Marea Verde como Txell Alarcón, pero carecieron de fuerzas en el último cuarto para regalar una victoria a los suyos.
El partido fue un tobogán de emociones. No en vano, el Araski pasó de dominar con cierta claridad en el primer cuarto por 18-13 a verse a remolque en el marcador tras el atasco ofensivo acontecido durante los minutos previos al intermedio (27-34).
Tras volver a recuperarse en el tercer cuarto y llegar a nivelar la contienda (51-51), el conjunto vitoriano terminó perdiendo un partido del que se ausentó por segunda jornada la ala-pívot belga Mununga. Pese a todo, Made Urieta acabó satisfecha en líneas generales con la imagen ofrecida por sus pupilas.
Urieta, satisfecha
“Me voy con buenas sensaciones. El objetivo de estos amistosos es crecer como equipo y hoy se ha visto un Araski totalmente diferente al partido del viernes. Hemos tenido minutos de mucha calidad y al final pequeños detalles han hecho que se escapara el encuentro. Cuando hemos subido el listón defensivo, estuvimos mejor. Luego en ataque compartimos bien el balón y generamos muchas asistencias y canastas de equipo. Hay que seguir trabajando para hacer un buen papel en el trofeo Olárizu”, explicó la entrenadora del Araski al final del choque.
En la semana entrante, el conjunto alavés volverá a disputar dos nuevos amistosos en casa, en concreto el viernes ante el Ensino gallego a las 19:00 horas y el domingo frente al recién ascendido Osés Ardoi a las 18:00 horas.