El Kutxabank Araski tenía una asignatura pendiente en los últimos años dentro de la Liga Femenina. Uno de los equipos que se le había resistido sistemáticamente era el todopoderoso Valencia Basket, pero el pasado sábado quedaron enterrados por fin los fantasmas en la Fuente de San Luis con una de las actuaciones más completas que se le recuerdan al grupo capitaneado por Madelén Urieta.

El conjunto vitoriano, de nuevo sostenido por ese célebre ADN que tanto se echó de menos durante el pasado ejercicio, se autocercioró de la solidez y buena salud de su proyecto en la cancha de uno de los gallitos de la competición. Pese a que el Valencia sufría sensibles bajas en su engranaje como Cristina Ouviña, Alba Torrens y Rebecca Allen o su desacierto desde el perímetro fue clamoroso con tan solo un triple anotado de 16 intentos, los méritos del Araski fueron incuestionables en tierras levantinas.

No es nada fácil dejar a un equipo de ese calibre en menos de 50 puntos y a ello hay que sumar que las alavesas también acreditaron una gran mordiente en ataque con varias jugadoras martilleando el aro local desde la línea del 6,75. Holopainen, Asurmendi, Alarcón, Van den Adel, Chagas y Atkinson consiguieron, al menos, un triple en una espectacular demostración de juego colectivo y altruismo.

Otro aspecto muy positivo fue el poderío bajo los aros acreditado por Maimouna Diarra, la indiscutible torre del Araski en esta temporada que sumó unas valiosas dobles figuras (11 puntos y 16 rebotes) y cuyo trabajo de intimidación también quedó de manifiesto con 3 tapones.

De momento, el cuadro vitoriano ya contabiliza tres victorias desde que se dio el pistoletazo de salida a la Liga Femenina, dos de ellas de indudable prestigio ante el Lointek Gernika y el Valencia Basket. Las de Madelén Urieta ocupan la sexta posición de una clasificación presidida más que nunca por la igualdad.

Únicamente el Spar Girona permanece imbatido a estas alturas y tras el Casademont Zaragoza, que también cuenta con cuatro victorias como las gerundenses, viene un nutrido pelotón de equipos con tres triunfos entre los que se encuentra el Araski. Precisamente el pabellón Príncipe Felipe de la capital maña ha sido designado por la Federación Española para ser la sede de la Copa de la Reina en 2023. De seguir así, el club vitoriano podría volver a ser uno de los ocho protagonistas tres campañas después de su última participación en Salamanca en 2020.