El informe favorable del Gobierno Vasco sobre la calidad del suelo en la parcela de la gasolinera Goya viene a cerrar el círculo y termina con todos los trámites de descontaminación de la parcela. "A tenor de los resultados de la investigación de la calidad del suelo realizada, no existe objeción para que se otorguen las correspondientes licencias que habiliten la actuación proyectada sobre el emplazamiento", concluye el informe de la dirección de Calidad Ambiental del Gobierno Vasco al que ha tenido acceso DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA y que llegó a las oficinas municipales de San Martín el pasado 30 de julio.

De esta manera se ratifican los rigurosos trabajos llevados a cabo por Repsol para descontaminar el subsuelo bajo la estación de servicio y convertir el emplazamiento "compatible con el uso previsto, uso terciario cultural", especifica en la resolución el documento de 22 páginas del Gobierno Vasco. Se despeja de manera definitiva el camino para llenar de contenido un edificio incluido en el inventario patrimonial vasco con la categoría de monumento y que carece de actividad desde junio de 2011, cuando dejaron de estar operativos para los conductores los surtidores de combustible.

Fruto de esa década en desuso y del deterioro que se ha podido generar en el edificio toca ahora elaborar un informe para precisar el importe de las labores de rehabilitación y el uso futuro de lo que muchos gasteiztarras conocieron como gasolinera y lavadero de coches.

Estipula la resolución del Gobierno Vasco que si esa nueva actividad "requiere excavación de materiales, será necesario redactar un plan de excavación". También recuerda que dada la existencia de servicios enterrados propios de la actividad de la estación de servicio, "se deberá informar si van a ser retirados o no". Insta también a realizar un control analítico de las aguas subterráneas en dos campañas de muestreo en periodos hidrológicos distintos.

A lo largo de estos años han sido innumerables los planteamientos que se han trasladado por las diferentes fuerzas políticas municipales para ubicar allí desde el centro fotográfico Alberto Schommer, una oficina de turismo, Emakumeen Etxea o el fallido Centro del Vino. Fue ayer el grupo Elkarrekin Gasteiz el que volvió a esgrimir una vieja reivindicación y la futura utilización de este edificio como punto de información sobre ecoturismo. También el lugar donde poder alquilar unas bicicletas con las que conocer el Anillo Verde o pedalear por alguna de las rutas que circunvalan Gasteiz y el territorio. A esa altura de la calle Cadena y Eleta llegan los numerosos autobuses con turistas que recalan en la ciudad y desde ahí dan comienzo a sus recorridos guiados.