El clima se compadeció de Álava en un mes en el que la hostelería cerró sus interiores y las terrazas se convirtieron en la única alternativa. Así, durante abril en la Llanada Alavesa solamente llovió nueve días, un fenómeno que desde Euskalmet han calificado como "significativamente inferior" al promedio observado en años anteriores.

Por otro lado, Araba registró en abril el doble de heladas de lo esperado en un mes en el que el País Vasco observó un contraste entre las temperaturas mínimas más bajas del siglo y los elevados días de sol, que situaron la media dentro de lo habitual, según ha informado la Agencia Vasca de Meteorología.

En este sentido, Euskadi como conjunto también ha tenido una experiencia similar durante este mes de abril. El número de lluvias fue inferior a la mitad de lo esperable y fue de los abriles más secos de los últimos años, solo superado por el de 2010.

Siete avisos amarillos

Por otro lado, en la Comunidad Autónoma Vasca no hubo episodios de meteorología adversa especialmente significativos. El Departamento de Seguridad emitió siete avisos amarillos: tres por riesgo de incendios forestales, dos por nevadas, uno por heladas y uno por viento en zonas expuestas.