La Diputación Foral de Álava ha aprobado nuevas medidas fiscales para aliviar la situación de autónomos y pequeñas empresas afectados por la crisis sociosanitaria.

Así, se prorroga la exención del pago fraccionado durante los dos primeros trimestres del año, y se decretan nuevos incentivos para arrendadores de locales hosteleros y comerciales que realicen en 2021 rebajas permanentes en los alquileres a sus arrendatarios durante al menos tres meses. Las deducciones podrán aplicarse tanto en el IRPF como en el Impuesto de Sociedades y podrán proyectarse a 2021 si no hay cuota suficiente.

Además, se han aprobado deducciones del 10% para inversiones en 2021, hasta un tope de 5.000 euros, con el fin de impulsar la actividad económica.Otra medida es la habilitación a los entes locales para que puedan facilitar bonificaciones extraordinarias a afectados por la crisis.

"Son medidas excepcionales para una situación excepcional", ha afirmado en la mañana de este martes el diputado general, Ramiro González.