l servicio de Bomberos de Ayala atendió este pasado fin de semana un aviso curioso. Desde la central telefónica del retén se avisaba a varios de sus integrantes para intentar capturar una culebra, de importantes dimensiones, que se había colado en un domicilio de la Avenida Zumalakarregi, en pleno centro de Llodio. Finalmente, lograron atrapar al ofidio que, una vez en su poder, fue trasladado a su hábitat natural para dejarlo en libertad.

Ésta no es la primera vez que los bomberos ayaleses son requeridos para solventar la aparición de reptiles en lugares no deseados por los humanos. Ya el pasado mes de julio retiraron otra culebra de la depuradora de una piscina particular en la zona de San Bartolomé del barrio, esta vez rural, de Larra en Llodio, que también fue soltada en el monte.

Asimismo, en octubre de 2011 y también en Llodio, otro vecino se llevó un buen susto cuando, al ir a retirar dinero de un cajero automático, se encontró con que de la ranura, además de los billetes, salía una víbora que trataba de atacarle al encontrarse atrapada por la cola en el mecanismo del cajero, aunque no hubo que lamentar males mayores. El reptil, en aquella ocasión, fue metido en una caja tras ser liberado y enviado a una protectora de animales.