Jon Pacheco y Nahuel Tenaglia. Nahuel Tenaglia y Jon Pacheco. Esta es la dupla que, salvo sorpresa en el recurso de Facundo Garcés, va a tener que hacerse cargo del núcleo de la zaga del Deportivo Alavés hasta el mercado de invierno. Así lo han hecho en las dos últimas jornadas, desde que el santafesino fue notificado de su sanción de un año por presunta “falsificación documental” para defender a Malasia.
Lo único positivo para los intereses del conjunto babazorro es que, dentro de este escenario inesperado y muy complicado, tanto el central de Saladillo como el de Elizondo han demostrado estar más que preparados para el reto. Solo hay que revisar el partido que uno y otro hicieron el pasado domingo contra el Elche, quien no pudo mantener su condición de invicto al caer por 3-1 en el Paseo de Cervantes.
Que Tenaglia, eso sí, esté rindiendo de manera más que notable en el núcleo de la retaguardia no es ninguna sorpresa. Más allá de que ya había jugado en ese puesto antes, durante la etapa de Luis García Plaza y también en Talleres, su nivel de los últimos años no podía venirse abajo por cambiar de posición. Su crecimiento ha sido salvaje desde el paso por Segunda División. Fue el mejor la temporada pasada.
Además, Tenaglia parece haber nacido para jugar en Mendizorroza. Entiende a la perfección lo que es el Alavés, lo mínimo que pide su gente, y nunca decepciona, ni siquiera en los días menos buenos. También ayuda que tanto su familia como él hayan abrazado la cultura de Vitoria-Gasteiz y de Álava. Es, sin lugar a dudas, uno de los futbolistas más queridos por la afición babazorra. Es uno más de la familia.
Ahora bien, la necesidad de alinearlo en el centro de la defensa, donde sigue dando la misma seguridad que en el lateral, sí que impide ver sus cabalgadas por la banda. Es innegable que ese costado derecho, ahora propiedad de Jonny Otto, es menos profundo esta campaña. Pero no queda otra. Al menos, Tenaglia ha sabido encontrar la manera de continuar aportando en la parcela ofensiva: el balón parado.
Frente al Elche provocó el penalti para el 1-0, convertido por Carlos Vicente, y tuvo varias ocasiones para marcar. La más clara, en la segunda mitad, al cabecear un lanzamiento de falta. Solo le faltó mayor puntería. Esa que, precisamente, tuvo en la primera jornada, cuando no desaprovechó su oportunidad para enviar a la red el balón con el que el Alavés pudo superar al Levante (2-1) ya en la prolongación.
SUPERANDO LAS EXPECTATIVAS
El desempeño de Pacheco, por el contrario, sí que está sorprendiendo más. Y no por sus aptitudes, que no son pocas, sino por cómo salió de la Real Sociedad. Allí, en Donostia, sus despistes defensivos habían sido muy criticados, tanto como para olvidar que era una de las grandes promesas de Zubieta y le recomendasen salir cedido. Sergio Francisco no contaba con él para el nuevo proyecto txuri-urdin.
En Mendizorroza, sin embargo, de momento no ha habido rastro de tales carencias. Al contrario. Aunque le ha costado entrar, a Pacheco se le está viendo como un defensor expeditivo, fuerte y que, encima, sabe sacar el balón jugado. Y eso sin olvidar su actitud de líder, que también es muy importante en esa posición. Esta es de las pocas buenas noticias de la desgraciada sanción de la FIFA a Garcés.
Lo normal, vistas las buenas sensaciones que está dejando el navarro, es que en la Real se estén tirando de los pelos ahora mismo. Los txuri-urdines se han ido al parón en descenso, con solo cinco puntos en ocho jornadas, y ya se está discutiendo el futuro de Sergio Francisco. Tampoco ayuda que Ćaleta-Car, la apuesta del club, no esté dando al nivel esperado. Aunque nadie lo está dando hasta ahora, en realidad.
ALTERNATIVAS
Los problemas para el Alavés pueden llegar si Pacheco o Tenaglia dejan de estar disponibles en algún momento. En Mendizorroza rezan por que no cojan ni un simple resfriado. Si acabara ocurriendo, que no sería raro –es demasiado difícil que un central no cumpla, como mínimo, un ciclo de tarjetas–, las únicas alternativas para Eduardo Coudet serían Moussa Diarra y Víctor Parada, ambos polivalentes.
Echar mano de Ibaia también es una opción que podría plantearse el técnico argentino. Los nombres con más papeletas en ese caso serían Xanet Oláiz y Álvaro García. Uno y otro entrenan con el primer equipo con asiduidad y en el club se les considera como dos de las mejores promesas de la cantera. Lo que, en principio, no se contempla en Mendizorroza es acudir al mercado antes de la ventana invernal.