Como viene siendo habitual en los últimos tiempos, entre las bajas por estado físico y las sanciones por acumulación de tarjetas, Eduardo Coudet está obligado a ajustar la retaguardia en esta jornada. Abdel Abqar, el líder en el eje de la zaga, se perderá la visita a Montjuïc tras ver su décima cartulina amarilla en lo que va de temporada en el último choque frente al Celta, por lo que el Glorioso pierde así a su mariscal en las labores defensivas.
Las variantes para la defensa albiazul se reducen a Mouriño, Pica o Garcés como los únicos acompañantes de Diarra en el centro de la defensa, aunque es evidente que no parten con las mismas opciones de jugar en la Ciudad Condal. El zaguero maliense se ha consolidado definitivamente bajo las órdenes de Eduardo Coudet y, teniendo en cuenta que Manu Sánchez está recuperando su nivel en el lateral izquierdo, es el futbolista escogido para el perfil zurdo del eje de la zaga.
A priori, Santiago Mouriño se perfila como el futbolista que Coudet escogerá para ocupar la vacante que deja libre Abqar en la defensa. La entrada del uruguayo en el once fue una de las apuestas personales del Chacho en su llegada a Mendizorroza y, de hecho, disputó todo en los primeros tres compromisos (los dos de liga ante Osasuna y el Athletic, además de la eliminación de Copa).
Sin embargo, su protagonismo se redujo drásticamente al caer lesionado, lo que le dejó fuera de la convocatoria ante el Valencia y el Girona. Reapareció en la victoria frente al Betis, donde jugó solamente el descuento con la premisa de fortificar la retaguardia, y ante el Celta se quedó en el banquillo.
Otra alternativa, aunque sin excesiva fuerza, es la de apostar por Pica como acompañante de Diarra. No en vano, el salmantino solo ha disputado un encuentro bajo las órdenes de Coudet, precisamente el del empate ante el Valencia, donde ocupó la vacante de Mouriño, quien estuvo lesionado a esas alturas del curso. Cumplió con creces su cometido, pero el argentino apuesta por otra terna de centrales.
Sin minutos, por el momento
Sería una sorpresa mayúscula que el debut de Garcés se diera ante el Barcelona. El central es el único futbolista que se ha incorporado a la plantilla albiazul en invierno, si bien su fichaje se hizo oficial durante el mercado estival. Lleva ya un mes en Vitoria-Gasteiz y todavía no se ha estrenado con la zamarra del Glorioso, síntoma de lo complicado que es recuperar el ritmo tras un año sin jugar un solo partido. En el último compromiso de liga llegó a salir a calentar, pero nada más. Y Sedlar, por su parte, tan solo ha jugado 11 minutos en liga desde el cambio de técnico, por lo que no tiene visos de ser de la partida en Montjuic.
En cualquier caso, el próximo compromiso frente al Barcelona no constituye, a priori, el mejor escenario para reivindicarse. El equipo de Hansi Flick es el más goleador del torneo (59 goles), y si algo ha lastrado al Deportivo Alavés en los últimos tiempos es su fragilidad defensiva, pues encadena nueve jornadas sin ser capaz de dejar la portería a cero.
