El Oporto anunció en las últimas horas la destitución de su entrenador Vítor Bruno, tras la derrota ayer, domingo, ante el Gil Vicente (3-1) -la segunda consecutiva en Liga- que deja a 'los dragones' en la tercera posición, a 4 puntos del líder, el Sporting de Portugal.
Tras el encuentro de ayer, donde fueron expulsados los españoles Samu Aghehowa -antiguo Samu Omorodion- y Nico González, la afición portista pidió la dimisión del entrenador, que ocupaba el banquillo desde el inicio de esta temporada, tras la marcha de Sérgio Conceição. Pues bien, José Tavares será su reemplazo provisional tras la decisión tomada desde los despachos por el director deportivo Andoni Zubizarreta.
El ex delantero del Deportivo Alavés, que vive su primera temporada en el fútbol luso tras un curso de aprendizaje en Mendizorroza que le ha cambiado la vida para siempre, no encajó nada bien la derrota. En primera instancia fue expulsado tras hacer observaciones al árbitro una vez finalizado el encuentro, pero lo peor estaba por llegar con una airada reacción que no venía a cuento.
Cuando se dirigía hacia la salida del campo, Samu se cruzó con dos operarios que transportaban un panel publicitario de los que suelen colocarse por detrás durante las entrevistas a los futbolistas de los dos equipos. El ariete internacional con España decidió descargar su rabia contenida contra el citado elemento, propinándole un puñetazo con ambas manos ante la sorpresa generalizada.
Tres partidos ha jugado el Oporto en este 2025 y tres han sido las derrotas del equipo portugués, incapaz por lo visto de saber ganar si Samu no tira del carro. Primero cayeron en la semifinal de la Taça de la Liga ante el Sporting (1-0), luego perdieron su encuentro en Madeira ante Nacional en un partido que se disputó en dos días por causas climáticas (2-0) y volvió a sucumbir este domingo ante el Gil Vicente (2-1). En ninguno de los tres partidos Samu pudo marcar y sin sus goles, el Oporto adolece de pólvora.
Desde el arranque de la temporada, quien fuera jugador del 'Glorioso' acumula cinco goles en la Europa League y 13 en la liga portuguesa. Un notable balance para un futbolista muy joven y con un gran porvenir que en Vitoria tuvo momentos muy brillantes a las órdenes de Luis García.