Una vez superado el parón de selecciones de octubre, al Deportivo Alavés se le presenta este domingo (18.30 horas) un exigente desafío en la visita al nuevo Estadio de la Cerámica. En el remodelado feudo castellonense espera un irreconocible Villarreal, un rival que pese a haber sumado los mismos puntos que el Alavés está confeccionado para pelear por unas cotas más altas. 

Basta con reparar al productivo mercado de traspasos realizado por la entidad groguet, que rubricó las millonarias ventas de Pau Torres, Boulaye Día, Samu Chukwueze y Nicolas Jackson. El conjunto dirigido en la actualidad por Pacheta, sometido a un profundo cambio de piezas tras el productivo zoco estival, mantiene en su base a dos futbolistas exalbiazules como Kiko Femenía y Alfonso Pedraza. 

Pedraza, a sus 27 años, es todo un emblema en el Villarreal. Acumula más de 150 participaciones con la elástica del ‘submarino amarillo’ y, además, durante la última semana fue noticia tras hacerse oficial su debut como internacional con la selección española liderada por Luis de la Fuente. 

Desequilibrante en 'Mendi'

El defensa cordobés fue una de las apuestas realizadas por el Alavés en la anterior etapa en la máxima categoría. Pese a disputar un solo curso en Mendizorroza al ser un jugador en préstamo, Pedraza mostró sus credenciales de ser un proyecto de futbolista a tener en cuenta. Se erigió como un extremo y lateral de enorme recorrido, incansable en los esfuerzos y con una clara vocación ofensiva.

El actual futbolista del Villarreal fue indiscutible durante la temporada 2017-18, en la que el Alavés acabó el ejercicio con el Pitu Abelardo al frente del banquillo tras un comienzo de temporada agónico con un doble cambio de entrenadores. Pedraza disputó 37 partidos entre el campeonato doméstico y La Copa y, además, anotó cuatro goles y repartió siete asistencias. Su producción goleadora y el incansable gen pronto recibieron el reconocimiento de Mendizorroza, que se rindió a su juego. 

Su etapa en Vitoria resultó decisiva para regresar a Villarreal formado como un futbolista de Primera División. De hecho, es en el territorio castellonense donde Pedraza ha desarrollado gran parte de su carrera, aunque vivió otra efímera aventura en el Betis. Ahora, bajo la dirección de Pacheta, el exalbiazul compite por un puesto con Alberto Moreno, con el que se reparte los minutos en el carril izquierdo. 

Clave en el ascenso

Kiko Femenía, por su parte, regresó al fútbol español después de media década en Inglaterra y de convertirse, además, en un futbolista centenario en el Watford. El exalbiazul, un futbolista de sobra conocido en Mendizorroza, fue uno de los protagonistas del ascenso a Primera en la temporada 2015-16 y brilló en el regreso a Primera, algo que le abrió las puertas de la Premier League. 

El exalbiazul firmó por el Villarreal durante el mercado estival de la temporada 2022-23, pero su protagonismo en el conjunto groguet no ha sido el esperado. Kiko Femenía se vio penalizado por la irregularidad durante la pasada temporada. La comenzó como un jugador de la absoluta confianza por parte de Unai Emery, pero la llegada de Quique Setién mermó por completo su progresión. 

en busca de minutos Con el técnico cántabro su minutaje se redujo a niveles insospechados y ahora busca recuperar el protagonismo bajo la dirección de Pacheta. No obstante, la competencia en el sector derecho es feroz. En este curso, Femenía acumula 262 minutos entre Liga y Europa League. Ha sido el titular en la competición continental, pero sus actuaciones en el campeonato doméstico son residuales, siendo el relevo de Foyth en el lateral derecho.

Kiko Femenía y Alfonso Pedraza son la viva imagen del escaparate que puede llegar a ser el Deportivo Alavés para los jóvenes talentos. Ambos llegaron a Mendizorroza siendo unos futbolistas con la obligación de reivindicarse y encontraron en Vitoria el contexto ideal para desplegar su mejor versión. Tras media década y con el Glorioso de vuelta en la máxima categoría, los caminos de dos futbolistas que destacaron durante sus etapas en la capital alavesa se vuelven a cruzar con la entidad que, en buena parte, les aupó hacia el lugar que ocupan en la actualidad.