En los partidos decisivos de la temporada, como el del pasado sábado en el Estadio de Gran Canaria, el acierto lo es todo. Tener una mala jornada de cara a gol puede dejarte sin ascenso y eso es, sin ir más lejos, lo que le ocurrió al Deportivo Alavés, quien, pese a no generar demasiadas ocasiones, sí que tuvo las suficientes para, en el caso de haberlas aprovechado, superar a Las Palmas, quien terminó regresando a la máxima categoría.

Es por ello que, en el play off que arranca este sábado, la escuadra babazorra va a estar obligada a recuperar esa potente pegada que, sin ser protagonista, ha aparecido en varios momentos a lo largo de la temporada. La mejor etapa, en este sentido, llegó entre enero y febrero, cuando, en apenas cinco jornadas, se marcaron 16 goles contra el Racing de Santander (3-0), Mirandés (1-3), Eibar (2-0), Real Zaragoza (1-4) e Ibiza (4-2).

Existe la opción, eso es cierto, de pasar a la final de la promoción por medio del empate en el cómputo global, pero esta alternativa, como siempre, es la más peligrosa. Así se ha demostrado en las últimas campañas mediante el rendimiento de los sextos clasificados, quienes, pese a partir con la desventaja del factor campo y no poder firmar las tablas, acumulan tres ascensos consecutivos, muchas veces por el conformismo de los favoritos.

El dato que debe preocupar al Alavés, en relación con lo anterior, es que, en las últimas 14 jornadas del campeonato regular, apenas ha marcado ocho dianas. Algo que, si bien le ha mantenido como uno de los equipos más goleadores de la categoría –el sexto por detrás del Albacete, Granada, Las Palmas, Villarreal B y Mirandés–, es probable que le haya impedido llevarse los puntos necesarios para acabar en una de las dos primeras plazas.

Villalibre disputa un balón con Suárez y Coco durante el Las Palmas-Alavés Efe

Sobre todo, teniendo en cuenta que la gran mayoría de los partidos de la segunda vuelta se han decidido por la mínima. Quién sabe lo que habría ocurrido si en duelos como los del Cartagena, Lugo, Andorra o Granada, todos ellos en Mendizorroza, el Glorioso hubiera estado más acertado de cara a portería. De nada vale, eso sí, arrepentirse a estas alturas de lo que ya no se puede cambiar, la única opción es mirar hacia adelante. 

Y, con todo lo anterior en mente, el Alavés necesita que sus atacantes tomen galones, tanto los delanteros como los que avanzan desde segunda línea. Se espera más de Villalibre, Miguel y Sylla, pero también de Rioja, quien debería marcar diferencias. El extremo sevillano sigue siendo el máximo artillero del equipo y, en la eliminatoria frente al Eibar, no puede pasar tan desapercibido. Talento para más de lo que se vio ante Las Palmas tiene, y de sobra.

A la espera de lo que suceda en la promoción, Rioja encabeza la tabla de goleadores, como se ha adelantado, con diez tantos y detrás le siguen Villalibre, Miguel, Sylla y Alkain, habiendo sumado cuatro. Además, Moya, Salva Sevilla y Tenaglia han marcado tres; Jason, Abde y Rober dos; y Guridi, Abqar y Benavídez uno. Todo ello para un total de 47 dianas a favor, en las que también hay que tener en cuenta los goles en propia meta.

UN SEGURO EN DEFENSA

Ahora bien, aún siendo innegable que el Glorioso tiene bastante margen de mejora en su parcela ofensiva –sobre todo, en la segunda vuelta–, los gasteiztarras no han salido tan mal parados de las recta final del curso. Esto se debe, entre otras cosas, al buen hacer de la defensa, el cual, incluso con bajas, ha contrarrestado la sequía en ataque con solo ocho tantos encajados en las mismas 14 jornadas. Ahí, como es lógico, también entra la labor de Sivera.

A raíz de lo anterior, la tabla de goles recibidos es bastante más favorable para los babazorros que la de marcados. En concreto, al Alavés le han endosado 33 dianas esta campaña, lo que solo mejoran Las Palmas (29), Granada y Levante (30). Para encontrar al Eibar de Gaizka Garitano, rival este sábado en Ipurua, hay que marcharse hasta los 36.