Aunque su experiencia en Mendizorroza no fue ni mucho menos la esperada, pues apenas tuvo minutos con la zamarra albiazul en tres temporadas, Saúl García no guarda mal recuerdo de su paso por el Deportivo Alavés. Para el jugador cántabro, cada etapa en el fútbol, igual que en la vida, debe servir como aprendizaje y ahora, en su casa y con su gente, solo piensa en demostrar todo aquello que, hasta hace no mucho, le llevó a ser uno de los laterales con más proyección de Segunda División. Algo con lo que, no hace falta aclarar, también espera ayudar a que su Racing de Santander encuentre la estabilidad.

¿Cómo marcha su segunda etapa por Santander?

Bueno, hay que dividirla en dos partes. Al principio, con Guillermo Fernández Romo, no tuve apenas opciones porque apostaba por los jugadores que le habían dado el ascenso el año anterior; y ahora, por el contrario, sí estoy jugando con José Alberto. La idea del equipo ha cambiado, su perfil es más ofensivo, y eso me favorece.

Necesitaba una oportunidad así después de su etapa en el Alavés, ¿verdad?

Sin duda. Necesitaba estar en un sitio tranquilo y que me permitiera recuperar la confianza. Sobre todo, después de la temporada pasada, que fue muy complicada en lo personal al no haber jugado prácticamente nada.

Se habló de que podía salir al extranjero, ¿por qué decidió volver al Racing?

Tuve alguna propuesta de fuera, sí. Pero, dentro de las opciones que había, la oferta del Racing fue la que más me convenció. Apretaron mucho por mí y eso me transmitió lo que necesitaba.

¿Por qué cree que no tuvo oportunidades en Mendizorroza?

A decir verdad, no tengo una respuesta clara, pero las decisiones internas del club influyeron bastante. Cuando fiché por el Alavés, después de una campaña muy buena con el Dépor, lo hice con la intención de ganarme un puesto en Primera. Sin embargo, Adrián Marín, que iba a salir, terminó quedándose el primer año y luego apareció desde abajo Javi López, por el que se apostó. Así se me cerraron las puertas.

También compartió vestuario con Rubén Duarte, ¿mantuvo buena relación con sus rivales por el puesto?

Sin duda, me llevo muy bien con ambos. Con Rubén, por ejemplo, hablé en la primera vuelta para cambiarnos la camiseta, pero no pudo estar por sanción.

Además de esto último, ¿sacó algo de provecho de su etapa como babazorro?

Claro. Cualquier experiencia sirve de aprendizaje y te hace más fuerte. No le doy muchas vueltas al tema, sinceramente; son cosas del fútbol.

Lo positivo es que ahora, con José Alberto, está disfrutando de nuevo del fútbol.

Exacto. No ha sido fácil, pues he tenido que recuperar el ritmo de juego, pero poco a poco me voy sintiendo mejor sobre el césped. Mi última actuación, ante el Sporting, fue la mejor en mucho tiempo y espero seguir en esa línea.

Están consiguiendo buenos resultados con usted sobre el césped, eso es evidente.

Sí, en campos exigentes, además. La llegada del nuevo míster nos ha dado un plus y, gracias a los últimos partidos, confiamos cada vez más en su idea. Ahora bien, tenemos que seguir trabajando.

¿Cómo llega el Racing a Mendizorroza?

Creo que el equipo ahora es más atrevido; no tenemos miedo a proponer con el balón y presionamos arriba. Diría que esas dos son nuestras señas de identidad.

¿Espera un partido muy diferente al de la primera vuelta?

Va a ser distinto, sí. El Alavés necesita ganar, además juega ante su gente, pero nosotros llegamos muy motivados a la cita. Ojalá podamos dar la sorpresa y llevarnos los tres puntos.

Contarán, igualmente, con el apoyo de su afición en las gradas.

Siempre están con nosotros, y eso nos da un plus. No tiene precio que nos acompañen a cualquier sitio.

¿En qué aspecto debe mejorar el Racing para certificar la permanencia?

Continuidad, sin duda. Las últimas actuaciones han estado muy bien, pero tenemos que seguir trabajando. Esto es muy largo, seguimos en una situación delicada, y nadie nos va a regalar nada.

¿Qué le está pareciendo el Glorioso esta temporada?

Me parece un equipo muy compacto, sinceramente. Luis García tiene las ideas muy claras, ha mantenido jugadores del año pasado y también se ha reforzado con grandes futbolistas de la categoría. Luego, aunque su racha reciente no es muy positiva, no tengo ninguna duda de que va a estar arriba. Creo que cualquier carencia que pueda tener en la plantilla, que ya de por sí me parece muy completa, la va a solventar en este mercado.

Usted ya había jugado en Segunda, ¿le parece que este año la categoría está aún más igualada que en anteriores ediciones?

Totalmente. Por ejemplo, en mi campaña con el Sporting (2019-20), recuerdo que lo hicimos muy bien y, sin embargo, no nos valió de mucho porque tanto el Espanyol como el Mallorca, de Luis García, nunca perdían. En la actualidad, el líder no es tan fuerte y cualquier partido se decide por pequeños detalles.

A pesar de esa igualdad, ¿cree que hay algún gran rival a batir?

El Levante, desde que llegó Javi Calleja, está muy bien; no obstante, a mí me gusta mucho Las Palmas. Su idea, y los jugadores que tiene, le convierten en un rival muy complicado.