La pasión de Abdelkabir Abqar por el fútbol surgió cuando este aún era poco más grande que un balón. De las calles marroquíes de Settat, el actual central babazorro se independizó muy joven, pues pasó a formar parte de la Academia Mohammed VI –a dos horas en coche de su ciudad –, y tras varios años de formación, llegó a España por medio del Málaga, quien se fijó en él durante un torneo en el que se enfrentó al Barça Juvenil. Posteriormente, en el verano de 2020, fichó por el Deportivo Alavés y, en la actualidad, sueña con debutar como albiazul en la máxima categoría.

¿Quién le contagió esa pasión por el fútbol que le ha hecho llegar hasta aquí?

No lo sé muy bien, porque empecé a dar patadas a un balón desde muy pequeño. El que, eso sí, siempre me acompañó a todos los campos, hasta que entré en la academia, fue mi padre. Él siempre confió en mis posibilidades.

¿Cuáles han sido sus referentes en la posición de central?

Me gustan muchos jugadores, pero, si tengo que elegir a alguno, me quedo con Mehdi Benatia, también marroquí; y, a nivel europeo, siempre me ha gustado mucho Sergio Ramos.

¿Qué le gusta hacer en su tiempo libre?

Invierto muchas horas en hablar con mi familia, que sigue viviendo en Marruecos. Luego, también pasó muchas horas jugando a la PS5, sobre todo a juegos como el FIFA o el Call of Duty.

¿Ha podido su familia verlo in situ en Mendizorroza?

No, aún no.

¿Y a qué espera?

Pronto, pronto (ríe). Tengo muchas ganas de que me vean jugar sobre Mendi, aunque mi madre de fútbol no sabe demasiado, y estoy en ello.

Aun así, ¿qué le dicen sobre su gran rendimiento?

Están muy orgullosos. Mi padre, sobre todo, ve todos los partidos y, como muchos otros, aparte de animarme me comenta los errores para que intente mejorarlos.

¿Piensa en su futuro? ¿Cómo se ve en unos años?

Es inevitable en el mundo del fútbol, pero yo prácticamente acabo de empezar y, en consecuencia, mi principal atención ahora mismo es el presente.

¿Ve el Alavés como un buen lugar para desarrollar su carrera?

Por supuesto. Siempre lo he tenido muy claro, desde el primer día que pisé la ciudad deportiva.

Pese a que tiene un contrato largo –hasta 2025–, ¿ha habido algún acercamiento por parte del Alavés para revisarlo? Su irrupción va a dar que hablar.

No, y tampoco me preocupa. En estos momentos, lo único importante para mí es ayudar al equipo a volver a Primera y jugar lo máximo posible en ese proceso.

¿Se ha imaginado defendiendo la zamarra albiazul en la élite?

Sí, es mi sueño. Al no poder hacerlo la temporada pasada, en la que fui convocado a varios partidos con el primer equipo, ansío que llegue ese día. Ojalá sea la próxima temporada.