- El filial alavesista luchará el curso que viene en la aguerrida Segunda RFEF. Esta categoría, la cuarta del fútbol nacional, consta de cinco grupos compuestos por 18 equipos en cada uno de ellos y el nivel de los contendientes reúne ciertas similitudes con aquellos más modestos de los que antiguamente competían en la 2ªB.
Los desplazamientos del Miniglorias serán de mayor distancia que los que ha realizado en esta temporada ya que compartirá el Grupo II con escuadras vascas, navarras, riojanas, cántabras y burgalesas. En él se encuentran otros filiales como el Burgos Promesas, UD Logroñés B, Rayo Cantabria, Real Sociedad B y Osasuna Promesas, aunque estos dos últimos tienen sendas posibilidades de ascender a la Primera RFEF.
El formato de competición es prácticamente un calco al de la Tercera RFEF. Existe una mayor competitividad plasmada a través de escuadras experimentadas como, por ejemplo, el Arenas de Getxo, Izarra o Sestao River, rivales con los que el Alavés B compitió en su día en 2ªB. El sistema dictamina que descenderán los cinco últimos de cada grupo -del 14º al 18º- y que los cuatro peores decimoterceros disputarán una eliminatoria en sede neutral de la que saldrán dos equipos que descenderán a la Tercera RFEF. En la zona noble el líder logra el ascenso directo y del segundo al quinto clasificado logran una plaza para el play off por promocionar. Estas eliminatorias también se disputan en una sede neutral y hay que superar a dos rivales con tal de lograr el ascenso mediante el play off.
En este sentido, la Segunda RFEF exigirá al filial alavesista una gran regularidad a lo largo de la temporada. Actualmente la distancia entre el play off por el ascenso y el play out por el descenso es de tan solo ocho puntos. Además, aquellos equipos que se encuentran en la zona media de la tabla se encuentran a un paso de rozar la gloria o el infierno. Una buena racha de resultados puede relanzar a la pelea por el ascenso o a la inversa, ya que en dos semanas una escuadra de la zona "tranquila" puede acabar en los puestos de descenso.
A pesar de que el Alavés B llegue como un recién ascendido a la Segunda RFEF, el objetivo del club afincado en el Paseo de Cervantes no es otro que situarse en la zona más alta para culminar la escalada hacia la Primera RFEF. Así, el salto que pudieran dar los jugadores del filial al primer equipo no sería tan alto ya que la distancia entre ambos será menor.
El Alavés B compartirá el Grupo II de la Segunda RFEF con escuadras vascas, navarras, riojanas, cántabras y burgalesas