Que la victoria del Deportivo Alavés frente al Valencia fue importantísima ya lo sabía cualquier aficionado babazorro, pero, por si había dudas de su significado para el vestuario albiazul, Florian Lejeune ha confirmado esta tarde en su comparecencia ante la prensa que acabar lo antes posible con la mala racha era algo primordial para que el equipo mirara al futuro con cierto positivismo y, de esta manera, siguiera mejorando su fútbol.

"Necesitábamos los tres puntos y creo que hicimos un partido muy serio. Tal vez no fue muy llamativo en cuanto a juego, pero sí ofrecimos esa intensidad necesaria para llevarnos el triunfo. Esto, lógicamente, nos ha ayudado mucho, porque, aunque uno siempre intenta trabajar lo mejor posible sin dar importancia a los resultados, es más fácil hacerlo cuando las cosas salen bien", ha explicado el francés.

Posteriormente, ya en el aspecto individual, Lejeune ha admitido que su rendimiento esta temporada no está siendo el mejor de su carrera: "Cuando pierdes muchos partidos es difícil rendir bien. Eso sí, yo intento hacerlo lo mejor posible y, al mismo tiempo, ayudar a mis compañeros, pues, al final, no hay que olvidar que esto es un deporte colectivo".

Por otro lado, el central galo ha defendido el trivote en la medular que empleó Mendilibar frente al cuadro che debido a su fortaleza en las segundas jugadas; ha comentado que la vuelta de Mamadou Loum al equipo le ha dado al Alavés "mucho físico" y proyección al área rival"; y también ha hablado del encuentro de este sábado ante el Real Madrid.

"Sabemos que va a ser muy difícil, pero vamos al Bernabéu con la confianza que nos dio superar al Valencia y con la intención de ofrecer un partido bonito. Para ello, va a ser muy importante salir juntos, animar, competir y, sobre todo, tener ambición para llegar arriba y marcar goles", ha apuntado.

Para finalizar, Lejeune no ha querido hacer cábalas sobre el calendario -"lo importante es ganar ahora", ha dicho-; y ha revelado cómo es su relación con sus dos compañeros del centro de la zaga: "Nos llevamos bien. He jugado con ambos, tanto con Laguardia como con Miazga, y todos buscamos hacerlo lo mejor posible. Nuestra responsabilidad debe ser empujar a los de delante para jugar más arriba".