- José Luis Mendilibar se mostró satisfecho en líneas generales con el punto conseguido por un Alavés al que el covid-19 puso en jaque en las horas previas al choque. “El plan es el mismo, que juegue el primer o el tercer portero es igual. Si Pina no puede jugar, lo hace otro porque la idea es la misma. No tenemos parejas hechas, sino que al cabo de la semana juegan todos con todos. Sé que les cuesta porque he llegado hace poco aquí. He visto la idea de lo quiero”, reconoció el de Zaldibar, quien eso sí efectuó algún reproche a la labor de sus pupilos. “La Real ha habido momentos en que sus centrales estaban en el centro del campo. Debemos ser más agresivos y no podemos permitirle que hagan pases interiores a Silva o Merino. Que lo hagan 20 metros más atrás, en eso debemos mejorar”, instó a sus pupilos.
También se congratuló por la capacidad de reacción del Alavés después de que la Real perdonara a sus hombres. “No nos hemos sentido muertos. Ellos han podido hacer el 0-2 y nos han dejado vivos. En el segundo tiempo salimos más agresivos y robamos más balón en campo contrario, aunque tenían más posesión que nosotros. Debemos no perder el balón tan rápido cuando robamos el balón. Ellos cuando pierden el balón, aprietan muchísimo. Así haremos sufrir más al contrario”, avisó Mendilibar, quien restó trascendencia al hecho de que tuviera que salir de inicio Owono. “No nos podemos volver locos; si juega Jesús de puñetera madre. No tenía más solución, cuando me han dicho que no podían jugar Pacheco ni Sivera, pues el siguiente”.
El técnico albiazul dejó claro que “tenía miedo porque nos enfrentábamos a un rival muy fuerte”, de ahí que valorase positivamente la reacción de sus pupilos. “El cambio de estilo es bastante grande y tenía temor porque había un rival enfrente que tocaba mucho el balón. Debemos hacer más daño tras la recuperación del balón y tener más calma. A veces, hay que dar tres pases antes de una asistencia de gol”, reclamó.
Respecto al dato que tan solo hizo dos cambios, Mendilibar también se mostró tajante. “No me gusta variar demasiado, sobre todo en la zona defensiva. No quiero que entren centrales, laterales o mediocentros defensivos en frío. Hoy he pensado que con estos dos cambios nos valían. Nos faltaba ser más verticales y eso he buscado con la entrada de Edgar”, reconoció.
Por último, sobre el estado anímico del Alavés tras este empate ante la Real Sociedad que pone fin a la sangría de malos resultados, fue claro. “No puedo pedir tiempo, sé para lo que he venido aquí. El punto está bien visto lo visto, solo espero que vayamos mejorando y hagamos las cosas mejor”.